Lo peor es que no tenemos envidia de París

Los barceloneses y los parisinos tienen en común la soberbia de aborrecer a los visitantes y de mostrarse altivos cuando no agresivos frente a los que les visitan

El tatuaje no te libera de ser quien eres   

El tatuaje como una huida de la realidad, como el fracaso del estribillo “otro mundo es posible”, como el triunfo de una utopía individual epidérmica que únicamente satisface el ego