Barcelona, moneda de cambio

El presidente de la Generalitat de Catalunya, Salvador Illa, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni. Foto: Lorena Sopêna / Europa Press

La esperanza ha sido traicionada por el alcalde Jaume Collboni al poner la ciudad al servicio de los intereses personales de Pedro Sánchez y Salvador Illa, dos presidentes que dependen del voto separatista

Lo peor es que no tenemos envidia de París

Los barceloneses y los parisinos tienen en común la soberbia de aborrecer a los visitantes y de mostrarse altivos cuando no agresivos frente a los que les visitan

Barcelona, la capital del crimen

Los prejuicios buenistas han provocado que las diferentes izquierdas españolas se nieguen a endurecer las leyes. Y la Generalitat separatista tampoco ha querido aportar a la Justicia los instrumentos necesarios

Barcelona, los pisos turísticos y el lobby hotelero 

GRAFCAT5810. BARCELONA (ESPAÑA), 21/06/2024.- El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni durante la rueda de prensa en la que ha anunciado que el Ayuntamiento no concederá más licencias para el uso turístico para viviendas residenciales y no renovará las existentes en noviembre de 2028, en aplicación de la ley catalana, de manera que en cinco años, los 10.101 pisos turísticos que hay en la ciudad volverían a ser residenciales.EFE/ Enric Fontcuberta

Uno podría sospechar que detrás del movimiento del gobierno municipal juega un papel relevante el lobby hotelero, como ya sucedió con la moratoria de 2015

El año perdido de Collboni

El problema es que antes de escuchar las reclamaciones de los barceloneses, Collboni obedece a Pedro Sánchez y Salvador Illa

Barcelona paga el pacto

Barcelona se convertirá en moneda de cambio entre los súbditos del sanchismo y sus socios. No obstante, la historia demuestra que, quien con ERC se acuesta, fracasado se levanta