Youtubers: una economía en la que pocos ganan
El youtuber mejor pagado de 2017 ganó 13 millones de euros, pero las ganancias de la mayoría de los youtubers son limitadas
En las redes sociales –y especialmente en Youtube— el estrellato está al alcance de un clic. La rapidez con la que han surgido estrellas en los medios digitales ha contagiado a millones de usuarios para crear contenido dentro de la plataforma, en busca de la fama y de las finanzas propias de quienes antaño aparecían en películas, en la televisión o en videoclips musicales.
Pero si bien los nuevos medios pusieron en marcha una nueva economía, quienes buscan ganar dinero en Youtube han tropezado con una máxima del mundo analógico: el grueso de las ganancias queda en las manos de unos cuantos. La desigualdad salarial es tan marcada entre los youtubers como en muchos otros gremios, y quienes se han lanzado a por el dinero de Youtube muchas veces se dan cuenta de que no alcanza para pagar las cuentas.
Por un lado, la revista Forbes publicó su lista de los youtubers mejor pagados de 2017, entre quienes se coronó el jugador de Minecraft Daniel Middleton, quien publica vídeos de sus aventuras en el videojuego todas las semanas. Middleton ganó más de 13 millones de euros en el año, seguido por estrellas digitales como Evan Fong (12,5 millones), Dude Perfect (11,3 millones), Mark Fischbach (10 millones) y Felix Kjellberg (9,7 millones).
La mayoría de los youtubers incluidos en la lista de Forbes publican, al igual que Middleton, contenidos relacionados con videojuegos (en especial sus sesiones de juego íntegras o resumidas), pero canales de Youtube los hay como gotas de agua en los océanos. Para estar en el 3,5% de los canales más populares debe superarse el millón de views por mes, y ni siquiera todos los que pertenecen a ese selecto grupo consiguen un salario decente.
A Youtube se agregan 300 horas de vídeo por minuto
Según un estudio realizado en la Universidad para Ciencias Aplicadas de Offenburg, en Alemania, conseguir un millón de visitas por mes deja en promedio entre 10.000 y 13.000 euros anuales, por conceptos de publicidad. Con una competencia voluminosa, no todos los que publican contenido obtienen la atención necesaria para remunerar el tiempo y esfuerzo invertidos.
Al mismo tiempo, los canales más populares se hacen cada vez más populares, y los nuevos actores encuentran una mayor cantidad de obstáculos para llegar al público meta. En 2016, el 3% de los canales más populares se hizo con el 90% de las reproducciones. A Youtube se agregan 300 horas de vídeo por minuto y el promedio de views por vídeo era de 89 en 2016, muy por debajo de las 10.000 de 2006.
La empresa –una subsidiaria de Google— también ha cambiado las reglas para sus creadores de contenido no pocas veces en los últimos meses. La transformación más importante vino luego de varias polémicas por la gran cantidad de contenidos ofensivos en la plataforma, para la cual Youtube presentó una solución que también afecta a los principiantes o a los canales más pequeños: ahora, para ganar dinero por publicidad, deben tener al menos 1.000 suscriptores y que sus visitas sumen al menos 4.000 horas de reproducción.
El escenario de los youtubers en la actualidad es similar al de los músicos que tienen sus canciones en plataformas como Spotify y Apple Music, cuyos modelos favorecen más a todos los demás involucrados (discográficas, productores, intermediarios) que a los mismos músicos, que se hacen con un porcentaje minúsculo de las ganancias.
Al igual que en el resto del mundo del espectáculo, es posible que un canal de Youtube sea un negocio millonario, pero es mucho más probable que se quede en el intento.