¿Tregua comercial? Amazon, Google y Microsoft huyen de China
Amazon, Google, Microsoft y una gran lista de tecnológicas que fabrican móviles y ordenadores en China se plantean el éxodo ante la incertidumbre comercial
La ambivalencia del Gobierno de Donald Trump y la incertidumbre ante el mediano y largo plazo obliga a tecnológicas como Amazon, Google y Microsoft a cambiar sus planes y reorganizar sus modelos de producción. Muchas empresas que durante años, incluso décadas, han fabricado sus dispositivos en China se preparan para migrar sus fábricas a otros países del sudeste asiático o a la India.
Reportes de junio apuntaban a que Apple se estaba planteando mover el 30% de su producción del iPhone en China a otros países, pero fuentes del sector –en declaraciones recogidas por el Nikkei Asian Review– dicen que la compañía de Tim Cook es apenas la más reciente (y la más lenta) del grupo de tecnológicas que proyectan trasladar a otros mercados facciones considerables de su producción.
Además de las ya mencionadas, el informe habla de Hewlett-Packard, Dell, Nintendo, Lenovo, Sony, Asus, Foxconn y Asustek, entre otras firmas. Microsoft pone la mirada sobre Tailanda y Amazon tiene ganas de ir a Vietnam para fabricar allí el Kindle y el asistente Echo (y Nintendo quiere seguir su estela para algunos de los componentes de sus consolas).
La decisión empezó a barajarse antes del pasado fin de semana, cuando Trump –después de reunirse con su homólogo chino Xi Jinping en el marco de la cumble del G20– dio a entender que pronto habrá tregua en la guerra comercial. Pero, según las fuentes citadas por el ratativo japonés, un coto a los aranceles a las importaciones desde China no frenará el éxodo de tecnológicas.
Incertidumbre en China, con o sin tregua comercial
La fuga de producción tecnológica amenaza el liderazgo de China en la fabricación de componentes, considerado el soporte del crecimiento feroz de su economía en las últimas décadas. Ninguna otra economía produce tantos móviles y ordenadores. Solo el segmento electrónico supuso ingresos por 1,35 billones de dólares en 2017 a Pekín.
Pero la guerra comercial ha sido despiadada para las tecnológicas, con o sin tregua comercial. La fabricación barata eventualmente llegará a su fin, o eso temen las compañías. Y los mercados emergentes asiáticos empiezan a ser más atractivos. Por si fuera poco, el crecimiento de la economía china está en su peor momento desde 1990.
Las fuentes del informe dicen que las empresas sufren la incertidumbre pese a la posible tregua, lo que adicionado al encarecimiento en los costes está facilitando el anhelo de traslado. Dicen que, por ejemplo, HP y Dell (los fabricantes número uno y tres de ordenadores portátiles) tienen planes para mover el 30% de la producción de estos dispositivos fuera de China. Otras empresas líderes de ordenadores también irían por ahí.
Los porcentajes de producción que pueden migrar que manejan las tecnológicas, desde luego, tienen que ver con la cantidad de productos que destinan a EE UU, donde los aranceles serían aplicados y el coste para los consumidores incrementaría. Pero el peor golpe sería para China, dado que esta decisión no solo afectaría su economía sino que dejaría sin trabajo a miles de ciudadanos.
«Los elevados costos de producción de China ya han provocado una disminución en los pedidos globales. Ahora, las incertidumbres asociadas con la guerra comercial están sumando insultos a las lesiones», dijo una fuente oficial citada por el diario nipón.