¿Por fin llegará el teléfono flexible de Samsung?

A un par de semanas que abra el Mobile World Congress en Barcelona, comienza a funcionar la usina de rumores e informaciones sobre las novedades que se podrán ver en la feria de móviles más importante del mundo.

Samsung volverá a estar presente, pero esta vez no usará a Barcelona como plataforma de lanzamiento del nuevo Galaxy S8. Lo más probable es que lo presenten en marzo o a fines de abril en un evento propio. Las prisas por la fabricación del Galaxy 7 Note, y el escándalo por las baterías incendiarias, han llamado a la calma a los ingenieros y gerentes de Samsung con el sucesor del S7.

Pero la tecnológica coreana no vendrá con los bolsillos vacíos, y para no defraudar a sus seguidores es muy posible que presenten un innovador modelo de móvil plegable.

No será un teléfono que cualquier interesado pueda comprar: será prototipos flexibles que se enseñarán a los representantes de otras compañías y, a lo sumo, testear entre el público la acogida que podrían tener.

Las informaciones del medio coreano ET News indican que estos dispositivos se plegarían por las caras interiores y exteriores: cuando está extendido, parece una tableta electrónica de ocho pulgadas. Cuando se cierra, la cara externa funciona como un teléfono de cinco pulgadas.

El desafío tecnológico implica que no sólo la pantalla tiene que ser flexible, sino que todos los componentes, como la batería o los circuitos electrónicos, tienen que estar adaptados a esta movilidad.

Hace un par de años que Samsung juega con el misterio de este producto. Inclusive han presentado comerciales con sus prototipos. En unas semanas, se verá si es una realidad.