Piezas dentales impresas en 3D, a medida y en minutos
La tecnología de la impresión 3D gana terreno en la digitalización de las clínicas dentales por la versatilidad, precisión y rapidez
La fabricación de piezas dentales, coronas, carillas y diferentes ortodoncias, es desde hace tiempo una de las potenciales aplicaciones de la fabricación por adición, caso de la impresión 3D.
En la industria dental, la impresión 3D tiene como principal ventaja —con respecto al fresado de piezas cerámicas— que ofrece una mayor «definición» en fabricación de piezas especialmente cuando se trata de «detalles intrincados como ranuras, irregularidades o concavidades propias de los dientes», dicen Quartz; y otros aparatos dentales, como férulas, fundas o dentaduras postizas.
Si bien el fresado ya permitía fabricar piezas dentales —normalmente provisionales— mientras el paciente esperaba en la consulta del dentista, el abaratamiento de la impresión 3D, los nuevos materiales y sobre todo una mejor significativa en la velocidad de impresión están acelerando la adopción de esta técnica de fabricación por adición, dicen desde Formlabs.
La compañía de impresoras 3D recientemente ha puesto en funcionamiento un departamento que diseña soluciones de impresión 3D específicas para las clínicas dentales.
Fotografía: Formlabs
Actualmente es posible imprimir en 3D una pieza dentales en apenas cinco minutos y empleando diversos materiales biocompatibles —hasta medio centenar de ellos— dependiendo del tipo y aplicación de la prótesis dental.
Por ejemplo, una dentadura postiza combina una resina para la base y otra para los dientes, mientras que una resina transparente permite imprimir en minutos férulas, retenedores o «mordedores», u ortodoncias «invisibles», sustitutos de los brackets tradicionales.
Según el ortodoncista Jay Burton «la adopción de la impresión en 3D dentro de la industria dental ha aumentado significativamente y continuará aumentando» conforme se abarata el proceso de impresión y se emplean nuevos materiales, capaces de reproducir y recrear piezas dentales personalizadas, duraderas y de calidad, y en poco tiempo o, al menos, «exponencialmente más rápido» que hasta ahora, dicen desde Formlabs.