Los makers desoyen las amenazas por imprimir en 3D respiradores
Numerosos voluntarios se organizan en internet para fabricar productos sanitarios que escasean, como las válvulas para los respiradores artificiales
Voluntarios de todo el mundo han comenzado a utilizar sus impresoras 3D para fabricar las válvulas de los respiradores artificiales, un dispositivo médico esencial para salvar vidas en casos graves causados por la Covid-19.
Las válvulas son desechables después de cada uso —por paciente— y es un producto sanitaria que, como sucede con mascarillas, guantes o batas, escasea en todo el mundo debido a la pandemia causada por el coronavirus.
Este tipo de válvulas pueden costar cientos o miles de euros —tanto como 10.000 euros, según diversas fuentes— mientras que las réplicas impresas en 3D tienen un coste material de alrededor de un euro, según TechDirt.
Desde hace unos días un hospital italiano está utilizando válvulas impresas en 3D como reemplazo y ante la escasez, que se han utilizado con éxito en al menos una decena de pacientes ingresados, según Massimo Temporelli, uno de los fundadores de la starup que está fabricando las réplicas en 3D.
Temporelli reconoce que su método de fabricación de válvulas es «poco ortodoxo, imperfecto, imposible de certificar… pero está salvando vidas».
Al menos un fabricante amaga con demandas legales
Esta iniciativa en Italia, un país que, como España y cada vez más, está sufriendo una crisis sanitaria sin precedentes, se enfrenta sin embargo con los intereses de los fabricantes de las válvulas que, según Metro, por un lado se se niegan a compartir información para facilitar su fabricación y por otro pueden plantear con «iniciar acciones legales por vulnerar sus derechos y propiedad intelectual.»
A pesar de eso la reacción de los makers —individuos que disfrutan fabricando y construyendo todo tipo de objetos— no se ha hecho esperar.
Desde China Naomi Wu —una de las makers más conocidas y reconocidas— se ofrece para imprimir en 3D este tipo de productos sanitarios. «Pueden venir a China a demandarme», dice en un tuit.
Okay:
#1 Fuck this
#2 Fuck them
#3 Give me any life-saving CAD files you want released
#4 They can come sue me in China
#5 I will live-stream that shit in overalls, pigtails and big watery eyes from local courthttps://t.co/hf0dhXkoLn— Naomi Wu 机械妖姬 (@RealSexyCyborg) March 18, 2020
«Si esas compañías de equipamiento médico no pueden atender los pedidos, que aprovechen la ocasión para hacerse buena publicidad compartiendo información sobre la fabricación de esos consumibles para que los demás podamos fabricarlos de la forma adecuada.»
Iniciativas en España: A.I.RE y Coronavirus Makers
La iniciativa —aplaudida públicamente por la Ministra de tecnología e innovación italiana— también va llegando a España: según EFE el Ayuntamiento de Santa Cruz de Bezana y la asociación Bezana Tech han puesto a disposición de las autoridades sanitarias cuatro impresoras 3D para la fabricación de válvulas para respiradores artificiales.
Necesitamos personas con impresoras 3D, corte laser, cnc, e inyección de plástico por todo el país.
— ReesistenciaTeam (@ReesistenciaT) March 16, 2020
También las iniciativas A.I.RE y Coronavirus Makers tratan de reunir y coordinar toda la información y a todos los voluntarios —incluyendo profesionales médicos— que están dispuestos a desarrollar productos sanitarios —como respiradores autónomos open source, de código abierto para ofrecer su uso sin restricciones por propiedad intelectual— o crear una red distribuida para la impresión 3d de material sanitario, entre otras iniciativas.