Las Google Glass ayudan a los niños autistas a interactuar con su entorno
Un experimento desarrollado en la universidad de Stanford (California) pretende que utilicen estas gafas con el objetivo de mejorar el reconocimiento de expresiones faciales
Las Google Glass se pueden llegar a convertir en un objeto muy útil para los niños autistas. Un experimento que se está llevando a cabo en la universidad de Stanford (California) desde hace varios años pretende que este colectivo las utilice con el objetivo de interactuar con su entorno.
Los investigadores han creado un software de reconocimiento de caras para las Google Glass. De esta manera, en primer lugar las gafas capturan las expresiones faciales y visualizan el tipo de comportamiento y, posteriormente, con los patrones almacenados en una base de datos, muestran al niño con autismo qué tipo de exteriorización es. Además, toda la información se almacena en una aplicación Android con la intención de que los padres del menor, por ejemplo, puedan consultarla cuando deseen.
A los niños autistas les cuesta reconocer caras. Un hecho que provoca que tengan dificultades para interactuar con la gente que les rodea y la finalidad de todo este proceso se basa en disminuir notablemente esta discapacidad y que puedan desarrollar y mejorar el reconocimiento de las emociones y de las expresiones faciales.
Por ahora, la universidad de Stanford ya ha entregado las Google Glass con el software desarrollado a 100 niños con autismo para poder analizar los resultados obtenidos. Los investigadores explican que durante cuatro meses «los niños con sus familias acuden a sesiones de 20 minutos cada día» y que se registra «todo lo que el pequeño ve en este periodo con las gafas».