Las compañías fintech captaron 35.000 millones de euros en 2018
La tecnología financiera o fintech "madura rápidamente" y está teniendo un "gran impacto" en el sector financiero, según los analistas
El pasado año 2018 las compañías dedicadas al desarrollo de tecnología financiera, o fintech, se ganaron la confianza del público y de las compañías financieras, lo que incrementó la aceptación y el uso de nuevos servicios que están cambiando cómo se utiliza el dinero.
También en 2018 las startups y empresas fintech se ganaron la confianza de los inversores y fondos de capital, que destinaron a estas compañías casi 35.000 millones de euros a escala global: un 120 por ciento más que en 2017 según datos de CB Insights recogidos por Reuters.
«Los inversores de capital riesgo han invertido miles de millones de dólares en las empresas de fintech con la esperanza de ganar cuota de mercado a las instituciones financieras tradicionales, ofreciendo servicios financieros digitales más fáciles de usar y más baratos,» dicen en Reuters.
Crece sobre todo la inversión en compañías fintech con origen en China: fintech Ant Financial, perteneciente a Alibaba, el «amazon chino», se hizo con más de 12.000 millones de euros.
También 2018 la norteamericana Vantiv compró la británica Worldpay por más de 10.000 millones de euros. Estas operaciones conformaron «la solidez del sector», según dijo entonces KPMG.
Una industria que «madura rápidamente»
Se considera que la industria fintech está teniendo «un gran impacto» en el sector financiero, lo que despierta a la vez «preocupación» y entusiasmo. Según un estudio reciente de la universidad de Maryville la mayor parte de los ejecutivos financieros encuestados mostró «preocupación por la competencia» a la vez que esperaban «colaborar con esas empresas en los próximos años.»
Según KPMG, la inversión global en fintech ganó impulso el año pasado «conforme se fue ampliando la diversidad geográfica y el alcance de la inversión fintech», y a medida que aparecen nuevos actores en escena que «aumentan el interés de los inversores» a pesar de la rápida «maduración» del sector.