Las ciberamenazas escalan entre las inquietudes de los CEO españoles
La encuesta anual que elabora la firma de consultoría PWC señala que el 61% de los consejeros españoles ve en el cibercrimen una amenaza para su empresa
La ciberseguridad ya es una de las principales preocupaciones para seis de cada 10 consejeros delegados (CEO) de empresas españolas. Es una de las principales conclusiones que se desgranan de la 23ª Encuesta anual mundial de la firma de consultoría PWC.
La compañía norteamericana realiza desde hace más de 20 años un análisis con las inquietudes de los empresarios de 42 territorios distintos y permite establecer una comparativa seleccionando algún país en concreto.
En este sentido, las ciberamenazas han escalado posiciones en el ránking de las preocupaciones para los consejeros delegados de España. Los delitos cibernéticos ya son su segunda inquietud, por delante incluso de la incertidumbre política y la velocidad con la que se producen los cambios tecnológicos que cada vez más empresas implementan.
Solo la excesiva regulación se sitúa por encima de los ciberataques, aunque con un porcentaje similar: el 61% de los consejeros delegados considera que es la principal amenaza para sus compañías.
A nivel global, los ciberdelitos no alcanzan ni siquiera el top 3 de la clasificación. Sí comparte el primer puesto la sobrerregulación, con un 36% de los encuestados situándo a este indicador por delante de otros como los conflictos comerciales (35% de los directivos) o la incertidumbre sobre el crecimiento económico mundial (34%).
El temor al cambio climático pasa del 3% al 20% en un año
Destaca también el incremento de la inquietud mostrada por los empresarios en torno al clima. En 2019, solo un 3% de los consejeros delegados españoles consideraba como una amenaza para su empresa el cambio climático, mientras que el informe de PWC refleja que este año será una inquietud para el 20%, es decir, dos de cada 10. A nivel global, un 25% contempla el calentamiento global una preocupación.
También ha caído la confianza en sus negocios. Mientras el año pasado un 41% de los consejeros españoles se mostraba optimista con el rendimiento de la empresa, para 2020 el porcentaje cae hasta el 32%. Un descenso que concuerda con las expectativas a nivel global, donde este indicador se desplomó hasta el 27% de los encuestados, el porcentaje más bajo desde 2009.
Una estadística que se entiende mejor si se compara con el índice de altos empresarios de España que cree que la economía global crecerá este año: solo un 10% considera que sí lo hará, frente al 12% que cree que no sucederá y al 78% que rechaza responder a la cuestión.