La UE desdeña la presión de EE UU por la red 5G de Huawei
La UE no pedirá una prohibición europea de los equipos de redes 5G de Huawei pero impulsará la colaboración de los Estados miembros en ciberseguridad
La Unión Europea (UE) ignorará las presiones del Gobierno de Estados Unidos para vetar la tecnología 5G de Huawei. Sin embargo, la Comisión Europea (CE) solicitará la próxima semana a los países miembros que compartan más información para analizar los riesgos de ciberseguridad relacionados con el despliegue de la nueva generación de redes móviles.
La CE no pedirá una prohibición europea del líder del mercado global de redes de telecomunicaciones y dejará que los países de la UE decidan por cuenta propia basados en motivos de seguridad nacional. El lobby de EE UU ha intentado hasta las últimas consecuencias convencer a economías estratégicas y gobiernos aliados de dar la espalda a la firma china.
La fiscalía de EE UU presentó el 28 de enero una demanda contra Huawei, dos filiales y la directiva Meng Wanzhou, arrestada en Canadá el 1 de diciembre de 2018, por 13 cargos de fraude y conspiración para saltarse las sanciones de Irán. El Gobierno de Donald Trump asegura que los equipos de la compañía pueden servir como móvil de espionaje del Ejecutivo chino.
Huawei presentó una contrademanda, alegando que la administración de Trump no tiene pruebas para respaldar sus acusaciones. La tecnológica y el Ejecutivo chino han rechazado las acusaciones, y hace una semana el embajador de China en España advirtió de que España puede sufrir consecuencias económicas si se dobla a la presión de los políticos americanos.
La CE recomendará no ceder a la presión por Huawei el martes
Reuters confirmó el viernes la negativa de la UE de ceder a la presión por Huawei, citando cuatro fuentes de la CE cercanas al asunto. El comisario europeo de Mercado Único Digital, Andrus Ansip, hará la recomendación el martes, según la agencia, y dirá a los miembros que se apeguen a las herramientas de la UE sobre seguridad de redes y sistemas de información.
Si bien la recomendación no tendrá fuerza legal, tendrá un peso político que eventualmente puede llevar a la legislación nacional en los países de la UE. Ansip recomendará que los Estados miembros intercambien información y coordinen estudios de evaluación de impacto sobre riesgos de seguridad y certificación para dispositivos conectados a internet y redes 5G.
Los grandes operadores de telecomunicaciones se oponen a una prohibición de Huawei porque creen que una decisión como esa tiene el potencial de retrasar bastante el despliegue de las redes 5G en el bloque. No obstante, Alemania ya estableció criterios más estrictos para los proveedores de equipos, sin hacer mención directa a Huawei o EE UU.