Juicero: cierra el timo de los zumos de 600 euros
La start-up Juicero recaudó más de 80 millones de euros por una máquina que aspiraba a ser la Nespresso de los zumos
Hace tres años parecía que iba a revolucionar el sector de la alimentación. Hoy suspende ventas, devuelve el dinero a los clientes y busca comprador. Es el camino que ha hecho en pocos meses Juicero, una start-up que basó su éxito en comercializar exprimidores de zumo por 600 euros (700 dólares) hasta que se descubrió que eran inútiles.
La empresa americana aseguraba que la máquina era capaz de “levantar dos Tesla” y la erigía como el único modo para exprimir correctamente unos zumos de fruta naturales que vendía por entre tres y seis euros. El engaño acabó cuando Bloomberg demostró que los paquetes se podían abrir perfectamente con las manos.
Cinco meses después de la denuncia del medio estadounidense, Juicero lamenta que “la creación de un sistema de fabricación y distribución eficaz a nivel nacional requiere de una infraestructura que no se puede lograr como negocio autónomo”. Ya en julio, la empresa anunció un recorte del 25% del personal y su intención de bajar los precios.
El fundador de Juicero presumía de exprimidores con más de 400 piezas personalizadas
Pero las máquinas de la compañía no sólo atraparon a varios miles de clientes ingenuos. Algunos de los fondos de inversión más conocidos del país también han sido víctimas de una compañía que recaudó más de 80 millones de euros en sucesivas rondas de financiación. Con la esperanza de convertirla en la Nespresso de los zumos, vehículos como Alphabet Ventures, Artis Ventures o Kleiner Perkins Caufield & Byers han perdido su inversión.
Quedaron prendados de una exprimidora que, en palabras de su fundador, tenía más de 400 piezas personalizadas entre las que destacaban “un microprocesador, un chip inalámbrico y una antena inalámbrica”. A la postre, han resultado inútiles.