Google se estrella contra las normas europeas de privacidad
Mientras, organizaciones internacionales vuelven a cuestionar su nuevo invento: las 'Glass'
El gigante estadounidense Google tiene numerosos frentes abiertos con varios gobiernos europeos. La causa es siempre la misma: el tratamiento de la privacidad por parte de la multinacional. El último caso conocido esta semana ha sido el de Reino Unido.
La Oficina del Comisionado de Información del Reino Unido ha ordenado a Google borrar los datos de usuarios recogidos a través de las señales de WiFi con los coches de Street View. La compañía tiene 35 días para eliminarlos o, de lo contrario, será acusada de desacato, lo que es considerado delito.
Los problemas del ‘Street View”
No es la primera vez que la firma se enfrenta a las políticas de protección de Reino Unido. En 2010 ya admitió que sus vehículos de Street View, encargados de fotografiar vecindarios para crear imágenes de las calles, habían recogido por accidente datos de las redes inalámbricas no seguras utilizadas por los residentes de más de 30 países.
De hecho, en abril, el Gobierno alemán sancionó al buscador con una multa de 145.000 euros por ese mismo motivo.
Procedimiento sancionador en España
Los problemas del buscador con los Ejecutivos europeos no acaban ahí. Esta misma semana la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) informó de la apertura de un procedimiento sancionador al buscador por su nueva política de privacidad, después de constatar la existencia de “varios indicios” de infracción.
La falta de información clara, la ausencia de finalidades específicas para varios servicios y el tratamiento desproporcionado de los datos de los usuarios son algunos de estos indicios.
También en Francia
Google permanece impasible. Ha respondido que su política de privacidad “respeta la ley europea” y les permite crear servicios “más eficaces”. “Estamos totalmente comprometidos con las autoridades relacionadas con este proceso y seguiremos estándolo”, aseguró en un comunicado.
Pero por si fuera poco, las autoridades francesas también acaban de darle un plazo de tres meses para “adaptarse” a las normas del país en materia de protección de información del usuario.
Google Glass
Mientras tanto, las Google Glass sigue aunando críticas y elogios a partes iguales. La Comisión Europea y directores de organizaciones de diferentes países enviaron una carta abierta esta semana al jefe de directorio de Google, Eric Schmidt, sobre las implicaciones en el área de seguridad de datos que puede tener su nuevo invento de lentes de realidad aumentada.
En el texto participan comisionados de países como Israel, Suiza, México, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, así como representantes de la UE. Quieren evaluar el impacto que el nuevo dispositivo tendrá en la vida diaria de los ciudadanos.
Las Google Glass permiten grabar o tomar fotografías sin consentimiento, y además pueden aplicar programas de reconocimiento facial a estos contenidos.