El teatro social de Blanca Marsillach despide el año en Barcelona
Las obras ‘Una noche blanca con los clásicos’ y ‘El toro y el banquero’ se representarán por primera vez en la capital catalana
El teatro social de Blanca Marsillach quiere despedir 2013 desde la capital catalana en un ambiente festivo, familiar y educativo. Barcelona acogerá, del 17 al 21 de diciembre, siete representaciones de las obras Una noche blanca con los clásicos y El toro y el banquero. Se trata de siete funciones que se representarán por primera vez en la ciudad catalana tras el éxito cosechado en otras como Madrid.
Los escenarios del CaixaForum y del Teatro Poliorama acogerán las obras en las que se evocará la poesía del Siglo de Oro y se acercarán los valores ecológicos con un lenguaje infantil, tal y como explica la propia Marsillach. “Queremos que vean que los clásicos no son aburridos. Que vean que los poetas del Siglo de Oro son los raperos del siglo XXI”, sostiene.
Clásico renovado
La primera de las obras es una adaptación de la producción del padre de Blanca, Adolfo Marsillach, que representó junto a la recientemente fallecida Amparo Rivelles y a María Jesús Valdés. Una noche blanca con los clásicos se ha despojado de los poemas de Santa Teresa de Jesús o San Juan de la Cruz y ha adaptado la función a un público más joven. La obra, que se ha representado durante cinco años en Madrid, pisa por primera vez tierras catalanas de la mano de La Caixa en colaboración con el Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya.
Durante la representación, el público no será un mero espectador y subirá al escenario. Pequeños y grandes se convertirán en los protagonistas y recitarán versos de Poderoso Caballero es Don Dinero o Gerineldo, entre otros. La función se podrá disfrutar los próximos 17, 18, 19 de diciembre en el CaixaForum y 21 en el teatro Poliorama.
Educación ecológica
A la adaptación del clásico teatral se suma El toro y el banquero, que se representará en el teatro Poliorama el sábado 21. La historia, promovida por Bosch y Junkers, gira entorno a los valores ecológicos. La obra centra su atención en el cambio climático y explica a los espectadores cómo pueden aportar su granito de arena en el día a día.
El encanto de la representación se traslada al propio vestuario, que ha sido confeccionado en la cuna del teatro, Broadway. Además, la obra escapa de la tradicional puesta en escena ya que la producción cuenta con siete canciones originales que mezclan hip-hop, flamenco y rap.
Las dos obras darán el colofón final a un año repleto de proyectos teatrales con el recuerdo de Marsillach padre muy presente. Es una leyenda sobre los escenarios que tuvo muy claro el potencial de la representación: “No soy tan ingenuo como para creer que el teatro puede transformar a la sociedad. Pero estoy seguro de que existe una posibilidad de despertarla”, sostuvo. Una lección que los jóvenes espectadores podrán descubrir.