El proyecto de crear un ‘Silicon Valley europeo’ en islas artificiales
El gobierno de Dinamarca quiere construir islas artificiales cerca de Copenhague para ampliar la superficie de la ciudad y atraer a empresas tecnológicas
El área metropolitana de Copenhague es la región más densamente poblada de Dinamarca: ocupa algo más del 6 por ciento de la superficie del país, pero concentra a más del 33 por ciento de la población danesa. Es una de las smart city por excelencia y es una de las urbes mejor valoradas según los indicadores de calidad de vida.
El proyecto Holmene
- A las afueras de Copenhague, situada a unos diez kilómetros de la capital, el gobierno quiere ampliar la superficie el municipio de Hvidovre construyendo nueve islas artificial en el mar que rodea a la capital danesa.
- El objetivo es aliviar «la escasez de viviendas y oficinas» en la capital y establecer algo así como un ‘Silicon Valley europeo’ dirigiéndose sobre todo (pero no exclusivamente) a las empresas internacionales de alta tecnología», según el ministro de Industria y Comercio, Rasmus Jarlov, en declaraciones recogidas por The Guardian.
- El archipiélago formado por islas artificiales se llamaría Holmene y, de aprobarse, añadiría más de 3 millones de metros cuadrados y 16 kilómetros de costa y 70 hectáreas de parques. «Y con suerte generará 12.000 nuevos empleos directos y hasta 30.000 nuevos empleos indirectos.»
Evitar errores del pasado: cuando el crecimiento de la industria en los años de 1960 llevó a la ocupación del litoral y de pequeños deshabitados pero ricos en vegetación y fauna se sustituyó la naturaleza por un paisaje industrial y estéril, explican los impulsores del proyecto. Medio siglo después la ciudad necesita más espacio para crecer.
Fotografía: Urban Power
Construcción por fases: la morfología del proyecto permite construir el archipiélogo por fases sin crear en el paisaje la imagen de una construcción a medio terminar. De aprobarse este año, el proyecto estaría finalizado en su totalidad en 2040.
Fotografía: Urban Power
Una isla para purificar el entorno: Una de las islas, la más grande, explican los promotores, se reservará para desarrollar tecnologías sostenibles y albergar una planta de procesamiento de residuos («la más grande del norte de Europa», aseguran) y de aguas residuales. Los parques eólicos y otras energías renovables producirán de 300 MWh de electricidad verde y contribuirán a reducir 70.000 toneladas de CO2 al año.