Chernóbil renace como planta de energía solar
Ucrania ofrece el terreno que rodea la central protagonista de una de las mayores catástrofes nucleares para la construcción de huertos solares
Hace unos días la compañía Solar Chernóbil puso en marcha un pequeño huerto solar situado a apenas 100 metros del sarcófago que cubre los restos de la central nuclear destruida en 1986 por la explosión del reactor número cuatro que causó miles de víctimas —entre 34.000 y 100.000, según la OMS— y provocó una nube radiactiva que recorrió parte del norte de Rusia y de Europa.
La idea del gobierno ucraniano es aprovechar los dos mil kilómetros cuadrados que rodean la centra nuclear para producir energía limpia dado que pasarán miles de años antes de que el hombre pueda ocupar de nuevo el suelo que rodea la central, hasta 24.000 años según la publicación Phys Org, y que incluye la ciudad de Prípiat que en su día habitaban en gran parte los trabajadores de la central y sus familias.
Con el propósito de incrementar el porcentaje de energías de origen renovable Ucrania ofrece a los inversores dos incentivos: alquila el suelo a un precio «extremadamente bajo» y compra la energía producida en él por encima del precio del mercado. Hasta un 50 por ciento por encima del promedio, según Fortune.
Paneles solares junto a la central nucelar de Chernóbil, cuyos reactores permanecen bajo un enorme sarcófago de hormigón y acero (a la derecha de la foto). Fotografía: Solar Chernobyl
Su proximidad a la central nuclear también facilita la conexión del huerto solar a la red eléctrica. La misma instalación utilizada hasta el año 2000 para distribuir electricidad de origen nuclear se utiliza ahora para distribuir electricidad de origen solar.
Ucrania opta por las energías renovables
La primera instalación solar realizada por Solar Chernobyl (de capital alemán y ucraniano) ocupa una superficie de 16.000 metros cuadrados y tiene una potencia máxima de 1 MW, aunque el objetivo es que la instalación crezca hasta los 100 MW de electricidad, suficiente para proporcionar energía a 2000 hogares.
Con este proyecto a medio camino entre la ironía y el pragmatismo Ucrania quiere incrementar la producción de electricidad de origen renovable para reducir su dependencia energética del extranjero y compensar la pérdida de sus dos plantas solares instaladas en Crimea, territorio anexionado por Rusia. Ucrania mantiene un conflicto con Rusia tanto por Crimea como por el suministro de gas natural.
Debido a esto «Ucrania ha incorporado rápidamente fuentes de energía renovables a su mix energético, inaugurando solo en 2018 cientos de megavatios de energía eólica y solar puestos. En la actualidad, el país cuenta con casi 600 MW,» dicen en Forbes.