Uno de cada ocho influencers de Instagram compra seguidores falsos
Casi todos los anunciantes multinacionales priorizan la calidad de los seguidores antes de contratar marketing de influencers
El 12% de los influencers de Instagram todavía compran seguidores falsos. Según un estudio de Campaign Deus, uno de cada ocho instagramers en el Reino Unido realizan esta práctica, que ya está penada por Unilever, el segundo mayor anunciante del mundo.
De hecho, un nuevo estudio reveló que el 65% de las marcas multinacionales tienen planes para aumentar sus inversiones en marketing de influencers en el próximo año, pero el 96% de las empresas consultadas agregó que «la calidad de los seguidores» está en la cima de sus prioridades.
Con «la calidad de los seguidores», las multinacionales claramente se refieren a los seguidores falsos o fantasmas, que inflan las listas de seguidores de muchos usuarios populares de Instagram, la red social de vídeos y fotos que forma parte del imperio de Facebook.
Instagram, la red social favorita de los anunciantes
Instagram es la red social en la que las marcas multinacionales más quieren invertir en marketing de influencers. Sin embargo, la empresa aún no consigue solucionar uno de sus problemas clave: la cantidad apabullante de seguidores falsos que la merodean.
Existen empresas dedicadas a vender seguidores falsos a los influencers o marcas que los busquen, algo contra lo que ni Facebook ni las demás grandes redes sociales han logrado luchar. Pero lo han intentado: hace pocos días, Twitter celebró una «quema» de seguidores falsos que afectó las cifras de popularidad de millones de cuentas.
Campaign Deus hizo su estudio analizando una muestra de 700.000 publicaciones en Instagram entre enero y junio de 2018. La Federación Internacional de Anunciantes (WFA) informó recientemente de que el 100% de los anunciantes prefieren esta app para su marketing de influencers, sobre Facebook (el 85%) y Youtube (el 67%).
Marcas como L’Oreal, Diageo y Ebay admiten que el problema de los seguidores falsos se está saliendo de las manos
Pero, además de Unilever –que anunció que no pagará a ningún influencer que compre seguidores–, marcas como L’Oreal, Diageo y Ebay ya han admitido que los fantasmas que inflan las cifras de estos usuarios se están convirtiendo en un problema insostenible para la industria.
Las multinacionales demandan «acción urgente» por parte de las tecnológicas y las autoridades para detener esta actividad fraudulenta.