Tinder discrimina a los mayores de 30 años (y le sale caro)

Tinder está en deuda con 230.000 personas de más de 30 años que le demandaron por considerar que su aplicación discrimina a los usuarios según la edad que tienen. La popular plataforma de citas tuvo que llegar a un acuerdo extrajudicial por el que perderá unos 23 millones de dólares (poco más de 20 millones de euros).

La demanda colectiva afirmaba que Tinder cobra un precio más elevado a los ususarios de un mínimo de 30 años que deseaban suscribirse a servicios de pago como Tinder Plus o Tinder Gold, que presentan algunas ventajas adicionales con respecto al servicio gratuito, como una cantidad ilimitada de «likes» en la app y otras funciones especiales.

A raíz del acuerdo extrajudicial, Tinder se comprometió a dejar de cobrar distintas tarifas a los usuarios en función de su edad, pero únicamente en la circunscripción de California, lo que tendrá un coste estimado de 5,75 millones para la empresa. A ello deben sumarse compensaciones por 17,25 millones de dólares, para el total de 23 millones.

Las curiosas compensaciones de Tinder

Pocos procesos judiciales terminan con los demandantes pavoneando mayores probabilidades de mantener contacto con aquellas personas que les parecen muy interesantes en una app de citas, pero así parece ser el final de las demandas a Tinder, cuando se ganan. O al menos de esta.

Esos 17,25 millones de dólares en compensaciones que perderá la compañía se pagarán, en su mayoría, dentro de su misma plataforma. Cada uno de los 230.000 demandantes tiene derecho a 50 «Super Likes» en la app, una opción de pago que permite indicar mucho interés en conocer a una persona determinada en la plataforma.

Los 50 «Super Likes» tendrían un valor de 50 dólares dentro de la aplicación, y los demandantes que lo soliciten de forma expresa también podrán optar a 25 dólares en efectivo, el mismo valor en más «Super Likes» o una suscripción de un mes a Tinder Plus o Tinder Gold. Nada mal: han pasado de acusar discriminación a amasar capital en Tinder.

Con respecto a la diferencia de precios para los mayores de 30 años, Tinder defiende que los adolescentes y jóvenes disponen de menos poder adquisitivo y necesitan precios más bajos para usar el servicio. Por esto solo cambiará la política en el estado de California, donde se presentó la demanda, pero de momento la mantiene igual en las demás regiones.