La GSMA suspende el Mobile ante el alarmismo por el coronavirus
La organización de la feria tecnológica se ve desbordada por el goteo de cancelaciones y opta finalmente por cancelar el MWC
No ha quedado más remedio que suspender el Mobile World Congress ante el alarmismo generado por el coronavirus. Así lo ha decidido finalmente el consejo de la GSMA en una reunión extraordinaria este miércoles. La posición de las compañías de telecomunicaciones frente a los organizadores ha acabado siendo decisiva.
«La GSMA ha cancelado el MWC Barcelona 2020 por la preocupación global con respecto al brote de coronavirus. La preocupación por los viajes y otras circunstancias hacen que sea imposible que celebre el evento. Las partes anfitrionas respetan y entienden esta decisión. La GSMA continuará trabajando al unísono y apoyándose mutuamente para el MWC Barcelona 2021 y futuras ediciones», ha afirmado la organización en un comunicado.
Las alarmas empezaron a saltar con la renuncia de LG a pisar la feria tecnológica y la puntilla la han dado este mediodía las firmas de telecomunicaciones, como Deutsche Telekom y BT, que representan a la parte de la industria que más poder de decisión tiene en este evento.
La reunión, por videoconferencia, ha generado una gran incertidumbre durante el día puesto que la GSMA ha evaluado hasta el último instante las posibilidades de seguir adelante con un MWC diezmado por las bajas de las grandes atracciones. En dicho organismo, compuesto por 26 integrantes, están presentes compañías de telecomunicaciones chinas, pero también las principales firmas europeas, como Telefónica, British Telecom, Vodafone y Orange.
Durante las úlitmas horas ha trascendido en algunos medios que Orange, la compañía francesa presidida por Stéphane Richard, que además tiene la presidencia del consejo, había decidido también retirarse del MWC. Pero Orange, finalmente, optó por mantener una posición institucional y esperar la temida decisión de la GSMA.
La decisión del consejo de la GSMA dinamita un eventó que LG comenzó a poner en la cuerda floja con el anuncio de su retirada, puesto que desató el efecto dominó: compañías como Nvidia, Ericsson, Cisco, Facebook, Amazon, Vivo siguieron sus pasos hasta prácticamente perder la cuenta de las bajas [aquí puede consultar la lista completa].
Los contactos entre las empresas de mayor peso en el Mobile han sido permanentes. Fuentes internas admiten que la preocupación ha aumentado con cada anuncio de retirada y que, finalmente, ha resultado inasumible pensar en que el goteo de bajas podía seguir a lo largo de los próximos días.
Un Mobile sin salida
Los organizadores, tras conocer las últimas bajas de este miércoles (Rakuten, Nokia y Deutsche Telekom), sabían que este Mobile iba a quedar descafeinado si se mantenía.
Se daba por hecho que el número de asistentes (107.000 en la última edición) se reduciría al haber perdido ya cerca del 10% de la superficie ocupada. También se había asumido que la recaudación para la ciudad de Barcelona, que se cifra en torno a los 500 millones de euros, se rebajaría.
Dos factores negativos a los que había que añadir un tercero: una agenda mediática marcada por la emergencia sanitaria, que eclipsará a las presentaciones y novedades que quieran lucir las empresas.
Críticas a la organización
Distintas voces consultadas coinciden al señalar que la crisis del coronavirus ha pasado por encima de la organización, que intentaba ayer, martes, rebajar la alarma al calificar la reunión del consejo, prevista inicialmente para el viernes, de ordinaria.
Y es que el GSMA, con sede en Londres, no ha dejado de dar bandazos con su posición: primero se negó a implantar medidas sanitarias y después, ante la salida de Amazon y otras empresas de renombre, implantó medidas paliativas.
Unas soluciones que, a ojos de algunas compañías que iban a estar presentes, no iban a cambiar nada. Las ultimas informaciones que señalaban que el periodo de incubación de la neumonía podía llegar a ser de 24 días y no de 14 echaban por el suelo algunas de las medidas de la GSMA, como la de no admitir a asistentes chinos que no hayan estado fuera del país, al menos, dos semanas de su llegada a Barcelona.
La otra clave del posicionamiento de los organizadores ha estado en el apartado económico, pues hay mucho dinero en juego en función de quien cancele su asistencia (feria o empresas). Wired ha publicado en las últimas horas que la GSMA estaba presionando al gobierno de España para que declare una alerta sanitaria y así facilitar las coberturas de seguro por cancelaciones.