¿Puede Disney derrocar a Netflix en la guerra del streaming?
Disney, con casi 100 años de historia, asalta el mercado del "streaming", dominado por Netflix, una empresa con menos recursos y apenas dos décadas de edad
The Walt Disney Company, cansada de lidiar con Netflix, avanzó su ofensiva en la guerra del streaming con el anuncio de Disney+ (Disney Plus), su propio servicio de contenidos audiovisuales en línea.
El asalto de la multinacional estadounidense fundada en 1923 es la principal advertencia de peligro que enfrenta Netflix, que por ahora se mantiene como el líder del mercado.
El pánico que provoca en Netflix la incursión de Disney en el mercado del streaming hizo que las acciones cayeran levemente en la primera mitad de noviembre, aunque después se recuperaron.
El anuncio no solo representa la entrada de un gigante al sector, sino también que Netflix deberá despedirse de los contenidos de Disney que actualmente incluye en su parrilla, al menos en EEUU.
Las adquisiciones de Disney en los últimos años le convierten en un sansón del entretenimiento. Lucasfilm le dio acceso a la saga de Star Wars, Pixar es la productora de películas animadas más importante del mundo occidental, Marvel tiene algunos de los filmes de cómics más populares de la historia, y 21st Century Fox es uno de los estudios más aclamados de Hollywood.
Esto quiere decir que la programación de Disney+ incluirá títulos como Star Wars: The Force Awakens, La pantera negra, Los vengadores, Los Simpson y Toy Story, por mencionar algunos. Pero no es solo la parrilla lo que preocupa a Netflix; hay más razones para sospechar que Disney podría dominar el mercado en los próximos años.
La amenaza de Disney sobre Netflix
Netflix competirá contra Disney, pero ya tiene como rivales a Youtube, Amazon Prime Video, Facebook Watch y la plataforma de streaming de Apple que llegará al mercado en 2019. Si bien el rey del streaming invierte más en contenido original que Amazon y Hulu, a su vez es superado por Fox, Time Warner y Disney, cuyos negocios no se limitan a este tipo de plataformas.
Los dos factores que juegan a favor de Disney son material original acumulado durante décadas y sus bolsillos sin prácticamente fondo.
El negocio de la casa de Mickey Mouse se nutre de los parques temáticos y los canales de televisión tradicional, con los que puede costear de sobra las pérdidas que pueda sufrir durante los primeros años de su incursión en el streaming; a diferencia de Netflix, que solo tiene una fuente de ingresos.
«Netflix es la más unidimensional de las compañías de streaming porque vive y, por tanto, puede morir por los ingresos de sus suscriptores. Las otras compañías tienen ingresos diversificados y muchos más recursos para financiarse», explica el analista de Emarketer, Paul Verna.
El colchón de Netflix
Aunque Netflix tiene todos los huevos están en la misma cesta, hay colchón: dispone de 137 millones de suscriptores globales, que le convierten en el líder del mercado: nadie tiene tantos.
La región más importante para Netflix sigue siendo EEUU, mientras que se espera que Disney acapare a millones de suscriptores en ese país pero también en Europa, donde Disney+ se expandirá a partir de 2020.
Con el 50% de la cuota del mercado cinematográfico después de la compra de Fox, Disney se eleva como el mayor rival de la empresa que inventó el mercado del streaming como lo conocemos.