Si Netflix pincha algún día será por estas razones
La cotización de Netflix en bolsa alcanza máximos históricos pero los analistas ya ponen fecha al pinchazo de su burbuja
Las cifras de Netflix son, como mínimo, sorprendentes. Sus resultados económicos y sus números en bolsa son los dos grandes avales de la firma norteamericana. Pero no todo lo que refleja la compañía parece ser tan positivo. En los últimos meses, Netflix ha mostrado algunos síntomas que podrían evidenciar que ha tocado techo. Aunque la situación parece lejana: los expertos no vaticinan un cambio de ciclo hasta 2020. Sus resultados positivos son de sobra conocidos.
En primer lugar, su nivel de ingresos. La empresa con sede en Los Gatos (EEUU) ha crecido año tras año. En 2014 facturó 5.504 millones de dólares; en 2015, subió hasta los 6.779 y en 2016 alcanzó los 8.830. Su segundo punto fuerte es la cotización en bolsa. En lo que va de año la compañía ha escalado el 16,5% en el parqué, que, encadenado con los últimos 12 meses, supone un alza del 54%. Con todo, se sitúa cerca de sus máximos históricos, lo que ha llevado el valor de la compañía a los 62.158 millones de dólares.
Los principales avales de Netflix son su cotización en bolsa y el nivel de ingresos
Para hablar del éxito de la plataforma fundada por Reed Hastings hay que analizar su expansión internacional. Una estrategia en la que se ha necesitado una gran inversión de recursos para captar usuarios, a sabiendas de que el mercado de los Estados Unidos no puede crecer más. Una campaña que también se ha reflejado en los gastos de marketing. Aquí empiezan los peligros para la compañía.
Después de esta acometida, el nivel financiero -concretamente las reservas en efectivo de la compañía-, muestran una disminución en el último trimestre analizado. Para ser más exactos, Netflix ha pasado de tener 1.467 millones de dólares en el último trimestre de 2016 a 1.077 en el primer trimestre de este año, es decir, se han esfumado 1.000 millones de euros en apenas medio año.
Una descapitalización que no ha cumplido con las previsiones. A tenor de los últimos resultados, el ritmo de adquisición de usuarios ha descendido. En el primer trimestre de 2017, la compañía se hizo con 4,95 millones de usuarios, lejos de los 7,05 que registró en el último trimestre de 2016.
Netflix: la calificación de la deuda y el registro de usuarios son las alertas más inmediatas
Por otro lado, agentes externos no terminan de fiarse de la salud de la firma norteamericana. Tal es el caso de la agencia de rating S&P que califica la deuda de Netflix de B1, lo que supone situarse como bono basura. Esta calificación parece que no mejorará en los próximos meses. «Las métricas de crédito seguirán siendo volátiles durante los próximos dos años, y la ratio deuda/ebitda continuará estando por encima de los niveles típicos para esta nota crediticia debido al incremento del pasivo para financiar los nuevos contenidos, por lo que una mejora de la nota es improbable», señalan desde la agencia.
Un pasivo que, en definitiva, aumentará en los próximos años. Netflix anunció este lunes una plan para emitir deuda por 1.000 millones de euros con acreedores «no estadounidenses». El anuncio que llega seis meses después de haber contraído otro compromiso de 800 millones de dólares para contenidos.
Todo por el monopolio
A pesar de la feroz competencia que azuza a Netflix, la plataforma de contenidos en streaming sigue liderando el sector. Su principal rival, HBO, y otras campañías más recientes en el mercado -como Amazon o Apple– están todavía lejos. Y es que Netflix produjo el año pasado 600 horas de contenido propio y ahora, en 2017, quiere llegar hasta las 1.000. Para ello, invertirá 6.000 millones de dólares en este ejercicio en la compra de contenido original.
Netflix: algunos expertos calculan que tiene aproximadamente 70 series en cartera
Hasta el momento, la estrategia de Netflix parecía ser infalible. La política de estreno de una nueva temporada cada dos semanas le ha llevado a tener más de 70 series en cartera, según las estimaciones de algunos expertos.