Lo que se tarda en robar un coche 'sin llave': entre 5 y 40 segundos

La captura en vídeo de cómo dos ladrones se llevan un Tesla Model S en Londres en cuestión de segundos y forma totalmente «limpia», sin romper nada, ha vuelto a poner sobre la mesa el problema de seguridad que suponen los sistemas de acceso y arranque son llave, incluso en vehículos sofisticado y de gama alta.

El Tesla Model S robado en el video estaba valorado en unos 100.000 euros.

Las llaves inalámbricas resultan más cómodas: coche y llave se comunican y validan por radio, por lo que el conductor no necesita sacar la llave del bolso o bolsillo.
Pero los delincuentes pueden robar este tipo de coches utilizando un repetidor de radio barato que se vende por internet.
El repetidor amplifica la señala que emite el coche para comunicarse con la llave inalámbrica. Si el coche está aparcado próximo a la vivienda donde está la llave inalámbrica el repetidor transmite la información de apertura desde el coche a la llave y de la llave al coche: de este modo el coche «cree» que la llave está cerca y se abre y se pone en marcha.
En el caso del Model S del vídeo viral el vehículo dispone de un mecanismo de seguridad adicional que consiste en un PIN que hay que teclear antes de ponerlo en marcha, pero su activación es opcional.

A pesar de que los expertos en seguridad llevan años alertando de sus riesgos, las marcas son incapaces de resolver un problema de seguridad cuya solución es tan simple como «apagar» la llave cuando no es necesaria.

Algunos fabricantes (Audi, BMW, Ford, Jaguar Land Rover y Mercedes-Benz) han incorporado sensores de movimiento en las llaves inalámbricas: de modo que cuando la llave permanece quieta durante un tiempo (porque está en casa, por ejemplo) la llave se apaga automáticamente. La llave se vuelve a activar cuando se mueve (si el conductor la coge o la guarda en el bolsillo.)
Kia ofrece una funda para guardar las llaves del coche con seguridad: funciona como una jaula Faraday que bloquea la señal de radio que emite la llave del coche, para evitar el robo del vehículo.
Una opción igual de efectiva pasa por guardar la llave del coche en el frigorífico (o para el caso, en cualquier recipiente metálico.)

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El uso del teléfono móvil como sustituto de las llaves del coche es una alternativa más segura, aunque probablemente excesivamente sofisticada en comparación con las llaves físicas de toda la vida.

Bosch trabaja en el desarrollo de una app móviles como sustituta de las cerraduras de los vehículos, para el acceso y arranque, una posibilidad que ya ofrecen algunas marcas, incluyendo el Tesla del vídeo.
Pero a diferencia de los móviles, las llaves físicas (con o sin chip) no dejan de funcionar si se quedan sin batería. Simplemente no dependen de baterías, y los nuevos sistemas (como las llaves inalámbricas) no han demostrado ser más seguras (aunque sí más cómodas.)

La publicación What Car? ha puesto a prueba algunos de los modelos con sistemas sin llave o con llave inalámbrica. Según el estudio la mayoría de los vehículos sin llave se pueden abrir y poner en marcha utilizando el sistema del repetidor de radio en entre 5 y 40 segundos.

Algunas recomendaciones para dificultar el robo de este tipo de vehículos pasan por utilizar un dispositivo para bloquear el volante (que utiliza llave) o los pedales.
Habilitar un segundo nivel de seguridad si está disponible, como el PIN en los modelos Tesla.
Mantener la llave inalámbrica del coche lejos de la ventana o una bolsa o recipiente metálico.
Apagar la llave inalámbrica si es posible.

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