Ni la sombra de los ‘teléfonos espía’ oscurece las ventas de Huawei
La facturación de Huawei aumenta el 39% en el primer trimestre de 2019 pero no cuantifica el impacto de las acusaciones de espionaje en sus cuentas
Ni las acusaciones de espionaje ni las presuntas infracciones de ciberseguridad que han acompañado a Huawei, la marca que más teléfonos móviles vende en España, han dañado su facturación. El gigante chino de las telecomunicaciones ha anunciado este lunes que sus ventas aumentaron el 39% interanual en el primer trimestre de 2019.
La compañía no cotiza en bolsa, pero ha emitido un comunicado en su web en el que asegura que el margen de beneficio neto se situó en torno al 8%, «ligeramente superior al del mismo periodo del año anterior».
En los primeros tres meses de 2019, Huawei vendió 59 millones de teléfonos inteligentes -extrapolando estas cifras al año entero, se situarían en unos 236 millones, 30 millones más que en todo 2018-.
Huawei no menciona el impacto de las acusaciones de espionaje en su cifra de negocio
La empresa, sin embargo, no menciona las acusaciones de espionaje ni a su impacto en sus cifras de negocio, y asegura que su alza en los ingresos hasta marzo se debe a que «mantuvo su foco en la infraestructura de las tecnologías de la información y comunicación y en los dispositivos inteligentes».
De hecho, Huawei se congratula por «haber impulsado la eficiencia y la calidad de sus operaciones», y se muestra optimista ante las «oportunidades de crecimiento sin precedentes» para su segmento de teleoperadoras ya que «2019 será un año de despliegue a gran escala de las redes 5G en todo el mundo».
La firma explica que, a finales de marzo, había firmado ya 40 contratos comerciales de 5G con «operadoras líderes a nivel global», y que ha vendido más de 70.000 estaciones base 5G «a mercados de todo el mundo».
Huawei defiende su inocencia
La compañía ha sido acusada por diversos países de espionaje con la supuesta instalación de «puertas traseras» en sus dispositivos, que han generado recelo en Occidente.
Sin embargo, los directivos de Huawei aseguran que no espían y defienden que sus aparatos son más seguros que los de otras marcas por estar sometidos a un escrutinio mayor. Así, Huawei se encuentra desde hace meses en el ojo del huracán.
A las acusaciones de espionaje, se une la detención en Canadá -a petición de EEUU- de la directora financiera de la compañía, Meng Wanzhou, por una supuesta violación de las sanciones impuestas por Washington a Irán.
Aunque está en libertad bajo fianza desde mediados de diciembre, la ejecutiva continúa en Canadá, donde fue arrestada el mismo día en el que el presidente estadounidense, Donald Trump, y el chino, Xi Jinping, se reunieron en Argentina en el marco de una cumbre del G-20, donde acordaron una tregua a la guerra comercial que ambos países mantienen desde el pasado año.