Jaguar Land Rover: dinero virtual a cambio de datos
El fabricante británico Jaguar y Land Rover pagará a sus clientes con criptomoneda por acceder a los datos generados desde sus automóviles
El fabricante de coches JLR (la mayor compañía automovilística británica, propietaria de las marcas Jaguar y Land Rover) ha comenzado a implementar en algunos de sus vehículos un «monedero» para criptomonedas denominado ‘Smart Wallet’.
La compañía pone en marcha así, inicialmente en fase de pruebas, un modelo de «compra de datos» procedentes los vehículos de la marca: los propietarios de esos coches obtendrán dinero virtual a cambio de que sus vehículos envíen información relativa a la circulación, como el estado del tráfico o la presencia de baches, a proveedores de servicios de navegación o a las autoridades locales.
Además los propietarios de estos vehículo también recibirán de esta forma una compensación económica a cambio de incluir su vehículo en el programa de coche compartido de Jaguar, que permite su alquilar por breves periodos de tiempo mientras que el propietario no está utilizando el coche.
Datos a cambio de pagos en peajes, carga eléctrica o café
Después los conductores podrán canjear la moneda virtual por determinados productos y servicios, incluyendo el pago de pajeas en autopistas, aparcamientos, carga eléctrica e incluso café, según JLR.
La moneda elegida, conocida como IOTA, está diseñada específicamente como moneda de cambio para la economía colaborativa entre dispositivos conectados, usuarios y recursos como en los casos de intercambio de datos (no necesariamente personales) y el aprovechamiento de la potencia de proceso de ordenadores particulares.
Una de las características de esta criptomoneda es que, a diferencia de otras monedas virtuales, su utilización está exenta de comisiones.
Datos relativos al tráfico y estado de las carreteras
Según Jaguar Land Rover varios de sus vehículo ya incorporan este monedero inteligente (incluidos el Jaguar F-Pace y el Range Rover Velar) que facilitará a los conductores el pago de servicios cotidianos como el aparcamiento o los peajes.
Desde JLR creen que disponer de datos generados por los vehículos, relativos a la conducción y vialidad, que se engloba dentro del concepto del «vehículo conectado» es esencial para mejorar la circulación y la seguridad vial.
Los vehículos conectados juegan un papel esencial en la economía compartida y en las ciudades inteligentes. Obtener información en tiempo real procedente de los vehículos reducirá la congestión y las emisiones, y mejorará la seguridad vial.