Google y Mastercard dan con la fórmula para espiar los hábitos de consumo
La tecnológica firmó un contrato con la marca de tarjetas para vincular las compras físicas con la publicidad digital
Google desembolsó varios millones de euros para conseguir que Mastercard comparta una información que da a la tecnológica una ventaja sobre la competencia. Durante el último año, algunos anunciantes de Google saben de primera mano si sus anuncios digitales se traducen en transacciones en tiendas físicas, gracias a un acuerdo secreto del que los consumidores no estaban enterados hasta ahora.
La multinacional estadounidense pagó una cantidad no especificada para que Mastercard comparta datos privados de los consumidores, en especial el detalle de las transacciones de sus más de 2.000 millones de tarjetahabientes. Las negociaciones demoraron unos cuatro años y el resultado es tremendamente beneficioso para Google, que ahora puede medir el gasto en el comercio que genera su programa de publicidad digital.
Cuatro fuentes con conocimiento del acuerdo, tres de las cuales trabajaron directamente en las negociaciones, confirmaron a Bloomberg la existencia de esta asociación gracias a la que Google tiene la capacidad de espiar los hábitos de consumo de sus usuarios no solo en la esfera digital, sino también en el «mundo real».
Google y Mastercard se defienden
«Las personas no esperan que lo que compran físicamente en una tienda se vincule con lo que están comprando en línea. Las empresas están generando una carga inmensa en los consumidores y no están asumiendo la responsabilidad de informar a los usuarios de lo que están haciendo y los derechos que tienen», comentó la abogada del grupo de defensa electrónica Epic, Christine Bannan.
La tecnológica defiende que en 2017 publicó «una nueva tecnología de cifrado doble que evita que tanto Google como nuestros socios vean la información de identificación personal de nuestros respectivos usuarios». «No tenemos acceso a ninguna información personal de las tarjetas de crédito y débito de nuestros socios», dijo al medio económico un portavoz de la compañía.
De la misma manera, Seth Eisen, portavoz de Mastercard, alegó que la marca de tarjetas comparte las tendencias de las transacciones con los comerciantes y sus proveedores para medir «la efectividad de sus campañas publicitarias», pero agregó que «no se proporcionan transacciones ni datos personales».
Google, junto a Facebook, forma parte del «duopolio» de los anuncios online: en 2017, se estima que los medios digitales ingresario 175.000 millones de euros por publicidad, del que un 60% quedó en manos de las dos tecnológicas.