Facebook evalĂșa el trabajo que le hacen los usuarios
La red social trata de combatir las noticias falsas evaluando la credibilidad de los usuarios que denuncian contenidos
Tessa Lyons es la responsable en Facebook de combatir la desinformación y la difusión de noticias falsas, y es quien ha confirmado en una entrevista para The Washington Post que «Facebook ha comenzado a puntuar la reputación de sus usuarios en una escala de 0 a 1 para identificar a los sujetos maliciosos.»
Sin embargo no se sabe cómo funciona este sistema de puntuación, desarrollado el año pasado; no se sabe por tanto si es aplicable a todos los usuarios o no, aunque parece depender de cómo y para qué se utilice cada persona su cuenta de Facebook y de si el usuario reporta valoraciones sobre contenidos o no.
Se trata de distinguir a los usuarios que utilizan de forma legítima la denuncia de contenido malicioso y a los que la utilizan de forma torticera
Lyons no ha detallado de qué manera se obtiene la puntuación o de qué manera se puede cambiar para evitar que los usuarios y la tecnología, caso de los bots, manipulen esos algoritmos.
Pero según Lyons «uno de los indicadores utilizados tiene que ver con la forma en la que la gente interactúa con el contenido». De modo que si alguien marca un contenido de Facebook como falso y Facebook verifica después que es falso entonces la persona que lo marcó tiene más credibilidad que un usuario que marque contenidos como falsos y Facebook los verifique como verdaderos.
Denuncias falsas de contenido legítimo
«No es raro que la gente indique que una publicación es falsa solo porque no está de acuerdo con el contenido o con quien lo publica», dice Lyons en alusión a los mecanismos ofrecidos a los usuarios —más allá de las opciones para expresar una reacción o sentimiento, como el «me gusta»— para que informen sobre contenidos cuestionables y que algunos usuarios están utilizando de forma maliciosa.
«No es raro que la gente indique que una publicación es falsa solo porque no está de acuerdo con el contenido»
Al final se trata de distinguir a los usuarios que utilizan de forma legítima los mecanismos que ofrece Facebook para denunciar contenido malicioso y a los que los utilizan de forma torticera usando una escala de 0 y 1. «Lo cual es una buena idea cuando eres una compañía valorada en medio billón de dólares que intenta que sean los usuarios quienes le hagan el trabajo,» dicen en Mashable.