Espiar el WhatsApp de la pareja puede suponer cárcel

Si la curiosidad mató al gato…espiar WhatsApps ajenos le puede llevar a la cárcel. Puede parecer una broma, pero no lo es ya que así está tipificado en el Código Penal. Concretamente en el artículo 197 como un delito de descubrimiento y revelación de secretos.

Interceptar mensajes para descubrir la intimidad de otra persona sin su consentimiento conlleva penas de prisión. Además hay otro peligro. Si alguien trata de monitorizar el WhatsApp de otra persona puede acabar pagándolo caro. Las búsquedas en google sobre cómo espiar Whatsapp lleva a la persona a diferentes aplicaciones maliciosas o comerciales pudiendo acabar con el espía suscrito a servicios de SMS premiun.

Por lo tanto, jugar a ser espías con la pareja, con un amigo o un familiar puede salir caro en caso de que se denuncie. Aunque, precisamente, es una práctica extendida, la de acceder y curiosear esas conversaciones con contactos desconocidos que tanto interesan a una pareja. Y es que WhatsApp se ha coronado como una aplicación estrella por los dos millones de usuarios en España, pero también por su facilidad de romper parejas y provocar conflictos amorosos. Sobre todo ahora, con el doble check como delator.