El paraíso de los piratas está en otra internet que no se puede cerrar
Las asociaciones de derechos de autor llevan años en pie de guerra contra las páginas de descargas, pero por cada web que se cierra aparecen dos
Páginas web tan populares como The Pirate Bay, bloqueada por las ‘telecos’ españolas por orden judicial desde 2015, siguen generando millones de visitas al mes. Las descargas ilegales se han ralentizado gracias al empuje de las plataformas de contenidos en ‘streaming’, pero esto no quita para que sigan existiendo.
Ahora hay nuevas formas de evitar que las autoridades judiciales puedan bloquear estas páginas web gracias a un nuevo internet descentralizado y que por ahora es accesible solo para aquellas personas dispuestas a dedicar un buen rato a configurarlo.
La internet descentralizada
Torrent-Paradise es un ejemplo de ello. Recién llegada a la plataforma descentralizada IPFS quiere agregar 20.000 nuevos ‘torrents’ cada día, partiendo de una copia de The Pirate Bay, la cual hace semanas que no permite que los usuarios suban nuevos archivos.
Como cuentan en TorrentFreak en IPFS se pueden alojar webs de forma descentralizada, de tal forma que el sitio no se aloja en un solo ordenador o proveedor sino que se reparte entre cientos o miles de ordenadores.
IPFS es el acrónimo de Inter Planetary File System, un sistema que permite navegar por sitios web alojados exclusivamente en esta plataforma. Aunque existen páginas web y servicios que sirven como puente desde la web “normal” que se utiliza hoy en día.
Sitios web «tecnicamente imposibles» de cerrar
Torrent-Paradise ha encontrado en esta plataforma una forma perfecta de seguir lo que ya es una tradición en internet, crear paginas web desde las cuales se puede descargar cualquier cosa.
“IPFS tiene como objetivo reemplazar HTTP y construir una web mejor para todos.”
Al estar alojado en cientos de ordenadores es técnicamente imposible cerrar la web. Si uno de estos ordenadores desaparece otro ocupa su lugar para continuar compartiendo datos con quien quiera acceder a ellos.
Esta plataforma comparte la idea de una red distribuida como la del ‘blockchain’, que usan monedas virtuales como Bitcoin o Ethereum. Al compartir recursos entre cientos o miles de servidores la caída de uno de ellos no afecta al resto de la red.
IPFS: perfecto sobre en teoría, complejo y lento en la práctica
Como muchas nuevas plataformas en internet que tienen como meta saltarse la censura o crear una nueva “red de redes”, los inicios son complicados y solo aptos para los más ‘geeks’.
IPFS ofrece una característica invaluable para el futuro de la red: descentralización. No está atada a una organización, ente, estado o empresa. Esta función también tiene sus inconvenientes.
El mayor problema de IPFS, como de otras plataformas similares, es que su red suele ser más lenta que la web actual. A falta de nodos ultrarápidos y de millones de servidores por todo el mundo su velocidad es menor que acceder a un buscador o web de noticias convencional.
Además el proceso de instalación es un problema por la complejidad que supone para alguien que no conozca los comandos de terminal. La página de instalación de IPFS es un perfecto ejemplo de esto: dependencias, terminales, comandos… Nada de eso está al alcance de la mayoría de usuarios comunes, más todavía teniendo en cuenta que hoy en día se navega más desde el móvil que desde un ordenador.