Ximo Puig contra Sánchez: »La gobernabilidad va antes que el partido»
El presidente valenciano considera que el PSOE necesita un debate profundo sobre el futuro de la socialdemocracia, pero sin prisas, y con la prioridad de constituir primero un gobierno en España
Contundente, pero a su manera, siguiendo las tesis de la mayoría de dirigentes territoriales. El presidente de la Comunitat Valencia, Ximo Puig, considera que Pedro Sánchez ha cometido un grave error al lanzar ahora al PSOE a un debate congresual, cuando todavía no existe un Gobierno en España. «La gobernabilidad va antes que el partido, primero es la gobernabilidad de España y luego ver como se resitúa la socialdemocracia», ha asegurado en el Círculo de Economía.
Para Puig «el cortoplacismo es una mala decisión», y la prioridad, a su juicio, es que el PSOE decida qué quiere hacer en un posible debate de investidura que impida unas terceras elecciones. En su caso ha sido claro, al desterrrar una alternativa de izquierdas, como pretende explorar Pedro Sánchez. «No hay posibilidad de formar un gobierno alternativo de izquierdas, y es necesario clarificar todos los escenarios, si hubiera una mayoría progresista sería el primer en apostar, pero no la hay».
Y ha añadido que él nunca ha pactado con la derecha, pero «en una democracia se debe hablar con la derecha, hay que gestionar la realidad aritmética y política».
Normalizar relaciones con Cataluña
El presidente valenciano ha pronunciado una conferencia en el Círculo de Economía en la que ha apostado por el corredor mediterráneo, defendiendo que se normalicen las relaciones políticas entre Valencia y Cataluña, porque sólo desde un punto de vista pragmático es lo que le convienen a los ciudadanos de las dos comunidades.
Puig ha recordado que las dos autonomías representan el 37% de las exportaciones de España. Y ha reiterado, en un foro con la presencia de Jordi Pujol, y de Miquel Iceta, el primer secretario del PSC que defiende la posición de Sánchez, que los partidos no pueden adoptar una posición «casi religiosa, esotérica, a la hora de establecer relaciones», para formar gobierno, con la idea de que los partidos se deben más al conjunto de sus electores que a sus militantes.
La posición de Puig puede ser determinante para inclinar la balanza en el comité federal del PSOE que se celebrará el próximo sábado. El equipo de Sánchez considera que tiene los apoyos necesarios para forzar un proceso de primarias y un congreso. En caso de salir derrotado, y aunque él mismo ha sostenido que no dimitará, su posición quedaría seriamente amenazada.
