El vicepresidente de la Generalitat arremete contra la mesa de diálogo que impulsa su gobierno
Jordi Puigneró reconoce la falta de apoyos internacionales, aunque celebra el daño hecho a la imagen internacional de España
Junts sigue con su campaña de desprestigio a la mesa de diálogo, pese a que la aceptaron por «lealtad» a ERC en el acuerdo de investidura. El vicepresidente de la Generalitat y conseller de Políticas Digitales, Jordi Puigneró, ha aprovechado su intervención en la Universitat Catalana d’Estiu para defender la DUI y ha vaticinado que el órgano entre gobiernos «no durará ni dos años».
En su intervención en la clausura del foro de debate independentista, que se celebra en Prada (Francia), Puigneró ha agradecido a la Catalunya Nord –nombre que el independentismo da a los Pirineos Orientales, región francesa donde se habla catalán– que se convierta en «tierra de acogida de exiliados de un Estado que ejerce su represión de forma permanente, nada ha cambiado».
Puigneró ha reconocido que la gente afín al independentismo está «algo desanimada y pesimista», a la vez que los ha reprendido por ello pese a definirse como «optimista escarmentado»: «No nos lo podemos permitir». El vicepresidente ha tirado de hemeroteca para levantar el ánimo, recordando que «desde 2010 han pasado muchas cosas».
«Hemos aprendido mucho en estos diez años»
«Hemos avanzado mucho y aprendido mucho también en estos diez años, hemos ejercido dos veces el derecho a la autodeterminación –el 9 de noviembre de 2015 y el 1 de octubre de 2017–. Nos hemos autodeterminado dos veces, pero no hemos sabido ejercer la independencia. Lo volveremos a hacer cuantas veces haga falta».
El conseller ha asegurado que el independentismo, tras todo lo sucedido en 2017, cuenta con «más información» ante un nuevo desafío al Estado, a la vez que ha reconocido que la Unión Europea no está de su lado, y más después de cerrar filas con Sánchez por la actuación de España en la acogida de afganos: «Debemos trabajar para que la UE también entienda nuestro derecho».
Sobre los «costes» del procés a Cataluña, ha reconocido que lo han pagado «con represión y exilio», aunque ha celebrado el daño hecho a la imagen internacional de España: «Debe ir a todos los sitios asegurando que es una democracia plena. Ha tenido costes de imagen”.
Torra rechaza la mesa de diálogo
Las palabras de Puigneró van en sintonía con lo que expuso el expresidente Quim Torra. El antiguo mandatario aseguró que el órgano, que se reunirá en Barcelona la semana del 13 de septiembre, es una trampa: “Nos estamos cerrando una jaula desde dentro”. Además, ha defendido que “no debería producirse”, al desconocerse “lo que se va a negociar”.
“Yo he estado en esa Mesa y el Gobierno dijo que nunca negociaría el derecho a la autodeterminación”. Torra ha asegurado que la actitud del Ejecutivo presidido por Pere Aragonès debería ser mucho más categórica: “O se negocia el referéndum o proclamo la independencia”.