La vacuna de Oxford pierde posiciones: su efectividad es del 70%
Los investigadores británicos obtienen un resultado inferior a la efectividad que han demostrado las farmacéuticas Pfizer (95%) y Moderna (94,5%)
Los primeros estudios preliminares han concluido que la vacuna que han desarrollado la Universidad de Oxford y la farmacéutica Astrazeneca tiene una efectividad del 70,4% para prevenir los casos de coronavirus. Una cifra que les aleja de los éxitos logrados por Moderna (94,5%) o por Pfizer (95%) en la recta final de la carrera internacional para distribuir el antígeno.
El resultado de los ensayos clínicos es el fruto de la combinación de dos dosis distintas de la vacuna. La primera ha sido efectiva al 90%, mientras que la segunda solo ha logrado frenar la Covid-19 en un 62% de los casos. “Estas cifras muestran que la vacuna en la dosis correcta puede tener hasta un 90% de eficacia”, ha celebrado el secretario de Estado para la Salud de Reino Unido, Matt Hancock en una intervención en Sky News.
Los investigadores británicos señalado que su prototipo es “eficaz para prevenir que muchas personas enfermen” y han destacado que ha funcionado bien en diferentes grupos de edad, tras contrastar los efectos de las decenas de miles de voluntarios que han participado en las pruebas con humanos.
En las pruebas han participado más de 20.000 personas, repartidas entre Reino Unido y Brasil. Como es habitual en estas investigaciones, se les ha dividido en dos grandes grupos. A uno se le ha suministrado una inyección real de la vacuna y a otro un placebo. Los analistas han detectado síntomas de coronavirus en 131 participantes, de los que 30 formaban parte de la muestra real.
A pesar de que los resultados no han sido tan exitosos como los que han alcanzado Moderna o Pfizer, los expertos de la comunidad científica han adelantado recibido la noticia con los brazos abiertos. «Nos sitúa un paso más cerca del momento en que podremos usar las vacunas para poner fin a la devastación causada por la covid-19″, ha expresado la profesora de Vacunología de la Universidad de Oxford, Sarah Gilbert.
La temperatura es la gran ventaja de la vacuna de Oxford
La vacuna británica debe conservarse a una temperatura estable de entre dos y ocho grados centígrados. Una característica que le otorga una gran ventaja con respecto a otros prototipos como el de Pfizer que requieren almacenarse a 80 grados bajo cero para no perder sus propiedades.
Si finalmente obtiene el visto bueno de los reguladores sanitarios internacionales, la facilidad para transportarla puede ser imprescindible para hacerla llegar a todos los rincones del planeta. Un problema que ya advirtió ayer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que este martes presentará oficialmente su plan de vacunación.
“Efectivamente estamos ya trabajando en esa cuestión y vamos a garantizar que al logística garantice la temperatura de esos 80 grados bajo cero para que la vacuna sea eficaz”, expresó el máximo responsable de la pandemia en España.
España aspira a obtener 31 millones de dosis de la vacuna de Oxford
La Unión Europea alcanzó un acuerdo en octubre con la Universidad de Oxford y la farmacéutica Astrazeneca para reservar una primera partida de 300 millones de dosis de la vacuna, de los cuales 31 le corresponden a España.
Para que la compra se haga efectiva de forma definitiva la Agencia Europea del Medicamento tendrá que dar luz verde primero a la investigación. Desde hace semanas están revisando en tiempo real todos los datos obtenidos por los investigadores en los ensayos.