Un informe de inteligencia europeo confirma las conexiones de Puigdemont con espías rusos
El documento asegura que el asesor principal del expresident, Josep Lluis Alay, se reunió en la primavera de 2019 con espías rusos para asegurar la ayuda del Kremlin en el procés
Cada vez hay más evidencias de que el Govern de Puigdemont buscó el apoyo de Rusia para llevar a cabo el proceso de independencia. Las pruebas halladas por la Guardia Civil en la instrucción del caso Volhov -procedimiento que investiga el presunto desvío de fondos públicos de la Generalitat- apuntan a esa dirección y ,ahora, un informe de inteligencia europeo ha confirmado las conexiones entre el entorno del expresident y espías del Kremlin en la primavera de 2019.
Este documento, al que ha tenido acceso The New York Times, asegura que el asesor principal del expresident catalán, Josep Lluis Alay, se reunió por aquel entonces con funcionarios rusos, exoficiales de inteligencia y el nieto de un maestro de espías de la KGB para asegurar la ayuda de Rusia en el proceso separatista.
Tanto Alay como Puigdemont confirmaron que los viajes a Moscú se produjeron, pero los calificaron como un acercamiento regular con funcionarios del país y periodistas y negaron que tuvieran algún tipo de relación con el procès. «Es una historia de fantasía creada por Madrid», explicó Alay.
Pero los documentos confidenciales a los que ha tenido acceso el citado diario indican que la relación con Rusia fue más allá de un mero encuentro diplomático. Los funcionarios con los que el asesor del expresident mantuvo encuentros estaban involucrados en una guerra híbrida del Gobierno ruso contra occidente.
De hecho, el pasado mes de noviembre, el titular del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, aseguró en un auto que tenía la sospecha de que pocos días antes de la Declaración Unilateral de Independencia (DUI), Rusia ofreció a Cataluña el traslado de 10.000 soldados y pagar la deuda catalana. Sin embargo, según informó El Periódico, Puigdemont rechazó la propuesta.
Estrategia para provocar divisiones en Occidente
Para el Kremlin, el apoyo a los independentistas era una estrategia para provocar divisiones en Occidente. Los de Vladimir Putin no solo se acercaron a Cataluña, sino que también ofrecieron su ayuda a partidos de extrema derecha españoles, según el informe europeo. Y lo mismo ocurrió en Italia, donde según unas grabaciones de audio, los rusos quisieron financiar al partido ultraderechista La Liga.
Se desconoce qué tipo de ayuda ofreció Rusia a los de Puigdemont, pero los viajes de Alay a Moscú coincidieron con la aparición del grupo Tsunami Democratic que, tras la publicación de la sentencia a los líderes del procés el 14 de octubre de 2019, bloqueó la actividad en el aeropuerto de Barcelona, provocando la cancelación de más de 100 vuelos.
Y esta es la relación que investiga la Guardia Civil que, según apunta, Alay estuvo involucrado con la creación de este grupo.
Además, esta institución estudia también la relación entre el asesor de Puigdemont y un empresario ruso que vive en Cataluña, llamado Alexander Dmitrenko y que, según el Ministerio de Justicia, es colaborador del servicio secreto ruso que opera en España. Las conversaciones entre ambos han sido analizadas ante la sospecha de que Rusia pudo participar en el procés.