Un alto cargo de la Generalitat se enriqueció con ayudas contra la pobreza según la Guardia Civil
Jordi Castells acumuló un patrimonio en solo unos años de cientos de miles de euros, además de comprarse dos viviendas y manejar cuentas en 23 bancos
El actual subdirector general de Cooperación Local de la Generalitat, Jordi Castells, un cargo adscrito al Departamento de Presidencia y exdirector de Relaciones Internacionales de la Diputación de Barcelona, acumuló un patrimonio en solo unos años de cientos de miles de euros, además de comprarse dos viviendas y manejar cuentas en 23 bancos. Y es que el dinero habría salido del presunto cobro de comisiones por la concesión irregular de subvenciones destinadas a financiar proyectos de cooperación en países en vías de desarrollo, según un nuevo informe incorporado al caso Voloh.
Así, según informa el diario digital El Confidencial, la fortuna de Castells acaba de ser descubierta por la Guardia Civil. No se puede olvidar que Castells es uno de los principales investigados por el presunto desvío de fondos públicos, a través de la Diputación de Barcelona, hacia fundaciones próximas a Convergència.
Concretamente, las dos más relevantes hasta ahora eran Catmon e Igman, controladas por el ex responsable de relaciones internacionales de CDC Víctor Terradellas y el actual diputado de JxCat, Francesc Dalmases. Pero, en el transcurso de la investigación, el magistrado Joaquín Aguirre, titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Barcelona, ha sacado a la luz decenas de expedientes de la Diputación que afectan a otras entidades supuestamente sin ánimo de lucro.
Y es que tras aparecer las primeras noticias que cuestionaban la gestión de los fondos de cooperación, Castells fue cesado en 2015 como responsable de Relaciones Internacionales de la Diputación. Sin embargo, fue fichado inmediatamente como alto cargo del Govern.
Sustituido por Josep Lluís Alay
En la corporación provincial le sustituyó la mano derecha de Carles Puigdemont, Josep Lluís Alay, que estuvo en el cargo hasta julio de 2018, cuando fue nombrado jefe de la Oficina del ex president. Alay, por su parte, está en el ojo del huracán por sus contactos con agentes de inteligencia, políticos y periodistas de la órbita del Kremlin.
Así, según la investigación del Instituto Armado, durante cuatro años, entre finales de 2011 y finales del 2015, el saldo bancario de Castells pasó de 342.110 euros a 216.634 euros. Pero ese descenso se produjo porque compró una vivienda y un ‘parking’ en Barcelona que le costaron 295.000 euros.
En dos años ganó casi 300.000€
Además, según otro informe, en ese mismo periodo recibió un préstamo de su madre de 100.000 euros. Pero la cosa no queda ahí, su bonanza económica siguió mejorando.
“Entre finales de 2015 y de 2017, los saldos bancarios de Jordi Castells pasaron de 216.634 euros a 502.333 euros, reduciéndose drásticamente en 2018”. Es decir, en solo dos años acumuló casi 300.000 euros en efectivo.
El descenso de efectivo en 2018 se debió a que ese año compró otra vivienda cerca de la Sagrada Familia por 220.000 euros, sin necesidad de préstamo hipotecario alguno. Asimismo, la Guardia Civil también ha comprobado que, entre 2013 y 2016, ingresó unos 44.000 euros en efectivo en una de sus cuentas “sin que se haya podido determinar el origen concreto de esos fondos”.