Turull extrema los ataques a Llarena: "Me ha convertido en preso político"

Nuevo episodio de la tensión de los dirigentes independentistas presos contra el juez Pablo Llarena, ofensiva ideada por Carles Puigdemont. El exconsejero de Presidencia de la Generalitat, Jordi Turull, ha acusado este miércoles al juez de convertirle en un preso político. «No sé si yo era un preso político en noviembre, pero ahora no tengo ninguna duda: usted me ha puesto en la cárcel porque, como dice literalmente en su auto, yo ‘no garantizo un acertado retorno al autogobierno'».

El político del Pdecat ha insistido en que «de los presos políticos que salieron de prisión sólo volvieron a ingresar los que han hecho política», en referencia a los exconsejeros que ingresaron en prisión el 23 de marzo, después del auto de procesamiento. «Mientras el Gobierno nos dice cuándo nos procesarán y por qué nos condenarán, el Supremo nos dice a qué presidente tenemos que votar», ha añadido.

El que fue responsable de Presidencia también ha advertido a Llarena de que no piensa renunciar a sus ideas, pese a que el magistrado pueda apreciar en sus manifestaciones un indicio de reiteración delictiva. Turull se suma a los ataques de Jordi Sànchez, Josep Rull y Raül Romeva contra el magistrado instructor del proceso contra los líderes del proceso soberanista.

Sànchez inició los reproches

El exconsejero de Territorio Josep Rull afirmó ante Llarena que no existe división de poderes en España. «No estaríamos aquí si no hubiéramos ganado las elecciones», sentenció en su comparecencia este martes ante el juez. En la misma línea, el exconsejero de Asuntos Exteriores, Raül Romeva, reprochó al juez que a su juicio vulnera su derecho a la defensa y defendió que «no es legítimo» judicializar lo que en su opinión es un conflicto político.

Josep Rull aseguró que los políticos presos no estarían en la cárcel si no hubieran ganado las elecciones

Inició la lluvia de reproches Sànchez. El expresidente de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) afeó a Llarena que «no se puede ser juez y víctima» porque el juez se considera perjudicado por la supuesta violencia del independentismo, con lo que en opinión de Sànchez no es objetivo.