Trias aguanta el chaparrón financiero en su primer cierre fiscal
El ayuntamiento necesitará 112 millones menos en financiación de lo previsto. El objetivo es llegar al déficit cero el próximo año
Aunque han empeorado notablemente los últimos cuatro años, las cuentas del Ayuntamiento de Barcelona resisten la difícil situación financiera que atraviesa la mayoría de las administraciones. El gobierno de la ciudad, liderado por Xavier Trias (CiU), cerró 2011 con una necesidad de financiación de 398 millones de euros, 112 millones menos de lo previsto. En la presentación del cierre del presupuesto anual, la administración local también valoró de forma positiva el flujo de caja de 112 millones.
La teniente de alcalde de Economía, Empresa y Ocupación, Sònia Recassens, aseguró que un cierre de cuentas mejor de lo previsto evitarán hacer una modificación de los presupuestos aprobados por CiU con el apoyo del PP.
Alivio funerario
Recassens remarcó que la necesidad de financiación es el dato al que el ayuntamiento debe prestar mayor atención. La cifra fue cubierta en el 2011 gracias al flujo de caja positivo de años anteriores. Parte de esta necesidad, unos 36 millones, se cubrieron de forma extraordinaria por los ingresos de la venta en las participaciones en la empresa Serveis Funeraris.
El aumento del gasto continúa en ascenso en los últimos cuatro años. En 2008, el gasto corriente del ayuntamiento se ubicó en 1.633 millones de euros. Aumentó a 1.731 millones en 2009 para ubicarse en 1.775 en 2010 y en 1.788 en 2011. El crecimiento contrasta con la disminución pronunciada de los ingresos que pasaron de 2.283 millones de euros en 2008 a 1.891 en 2011.
Menos ahorro
Otra de las cifras negativas que presentó la administración local fue la caída del ahorro, que suponía el 28,5% de los ingresos en 2008 a 5,4% en 2011. “Ante la dificultad de conseguir financiación es importante que cumplamos un objetivo de ahorro del 12% de los ingresos este año”; aseguró la responsable de las cuentas públicas municipales.