Torra recurre su inhabilitación y pide al Parlament desautorizar al TS
El president tacha la condena del TSJC de "sentencia política" y anuncia que agotará las vías internas para poder llevar el caso a la justicia europea
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha reaccionado a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que le condena a año y medio de inhabilitación por desobediencia a la Junta Electoral Central (JEC) lanzando una enmienda a la totalidad de la justicia española. Torra ha anunciado que presentará un recurso al Tribunal Supremo (TS) y también que pedirá al Parlament que desautorice al TSJC.
En el marco de una comparecencia sin preguntas, el president ha reducido toda la causa judicial a una operación política para apartarlo de su cargo. «Un tribunal formado por tres personas desproveídas de la más elemental imparcialidad, en un proceso lleno de irregularidades, impulsado por una fiscalía convertida en garante de los intereses del gobierno español, pretende cambiar a un presidente escogido por los representantes de millones de catalanes», ha concluído.
Torra ha insistido en su mantra de que a él no le puede inhabilitar un tribunal «con motivaciones políticas», sino que «solo lo puede hacerlo el Parlament», por lo que pedirá a la cámara catalana que se posicione sobre la sentencia. No se trata, ha alegado, de darle apoyo a él, sino de «dejar claro que los presidentes en este país no los deciden los tribunales».
El presidente catalán también ha dejado claro que exprimirá la vía judicial. Para empezar, con un recurso al Tribunal Supremo (TS). Porque, pese a subrayar que su confianza en la justicia española «es nula», ese paso es imprescindible para después poder elevar el caso a la justicia europea.
En ese sentido, la coincidencia este jueves entre la resolución del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre la inmunidad de Oriol Junqueras y la de su caso le ha servido para establecer el contraste entre unos tribunales, los españoles, para él solo al servicio de la «represión», y otros, los comunitarios, que son los únicos en los que los independentistas confían en encontrar «justicia».
El recurso de Torra al Supremo
El equipo legal de Torra, encabezado por Gonzalo Boye —el también abogado de Carles Puigdemont— basará su recurso en la negativa del TSJC a elevar al tribunal de Luxemburgo cinco cuestiones prejudiciales que Boye planteó sobre aspectos referidos a supuestas vulneraciones del derecho del president a un juez imparcial.
El presidente del tribunal que juzgó a Torra, Jesús María Barrientos, rechazó la petición por no haber sido presentada, alegó, en el momento procesal adecuado, y el TSJC también desestimó el recurso que presentó Boye contra aquella primera decisión.
Ahora, el plan, como ha explicado el propio abogado, es presentar un recurso de casación al Supremo volviendo a solicitar que esas consultas prejudiciales se eleven al TJUE, algo a lo que, según Boye, el alto tribunal estaría obligado. Según las cuentas de Torra y su equipo legal, ese proceso podría posponer hasta un año y medio la decisión final sobre la posible inhabilitación del presidente catalán, lo que le permitiría exprimir la mayor parte de lo que queda de legislatura.
