Torra exige a Junts que salga de la Generalitat
El expresidente del Govern cree que el independentismo "quedará tocado" si se consuma la suspensión de Laura Borràs
Quim Torra se ha presentado en el Parlament para expresar su apoyo a Laura Borràs, quién se encuentra a pocos minutos de ser suspendida como diputada y, por lo tanto, de dejar su cargo de presidenta de la cámara catalana. En una declaración a los medios de comunicación, el expresidente de la Generalitat ha exigido a Junts que se plantee su salida del Govern, siempre que se consume la salida de Borràs.
“Si la presidenta del partido es suspendida y Junts cree que es injusto, la reflexión conduce a una decisión clarísima”, afirma Torra. La mesa del Parlament se reúne a estas horas para debatir la aplicación del artículo 25.4 del reglamento de la cámara, que obliga a suspender los derechos parlamentarios de aquellos cargos vinculados a casos de corrupción.
Un centenar de personas se han concentrado a las puertas del Parlament, en el recinto de la Ciutadella, para mostrar su apoyo a la figura de Borràs. Los presentes han gritado insultos contra Pere Aragonès y ERC, así como acusaciones de manipulación hacia los medios de comunicación.
El artículo 25.4 del Parlament
La normativa del Parlament de Cataluña, en su artículo 25.4, establece la suspensión de los derechos parlamentarios de un diputado, siempre que tenga un acto firme de juicio oral por delitos vinculados con la corrupción. Con la pérdida de la condición de diputada, Borràs podrá mantener su acta, pero sin prerrogativas como el ejercicio del voto o el cobro del sueldo.
Otra opción que se contempla, desde el entorno más fiel a la presidenta del Parlament, es la petición de un informe a la comisión del Estatuto del Diputado para valorar la aplicación del mandato judicial. Según fuentes jurídicas, esta maniobra sería una nueva táctica dilatoria, sin ningún tipo de recorrido a largo plazo.
Antes de recurrir a la aplicación del reglamento del Parlament, todos los partidos de la oposición (Especialmente ERC y PSC) llevan pidiendo a Borràs que dé un paso al lado, en un intento de “preservar la ejemplaridad de la institución”. Lejos de atender a estas demandas y a parte de Junts, Laura Borràs niega el gesto.
Fiscalía pide seis años de cárcel
Borràs afronta una petición, por parte de Fiscalía, de seis años de cárcel y 21 de inhabilitación de cargo público, en virtud de unos delitos de prevaricación y falsedad documental. El ministerio fiscal acusa a la líder juntera de fraccionar 18 contratos menores, con un valor global superior a los 300.000 euros, para beneficiar a un informático amigo suyo.
Pese a las muestras de apoyo en público y en las redes sociales, en el seno de Junts per Catalunya no existe una posición unánime en el caso de Laura Borràs. A raíz del sentido de voto de ERC y la CUP en la aplicación del reglamento del Parlament para suspender a la presidenta, una parte de la dirección de Junts ha pedido la dimisión a Borràs.
Las voces consultadas por Economía Digital no niegan el calificativo de persecución política para el caso de la Institució de les Lletres Catalanes, pero a la vez quieren evitar el “bochorno institucional de la suspensión”. Cierto que Borràs ha consolidado su liderazgo en el partido, después de los congresos en el sur de Francia y Hospitalet de Llobregat, ahora bien, sus movimientos generan fisuras.