Torra exige a Colau que escoja bando: represaliados o represores
El president reprocha a la alcaldesa que le diera plantón el sábado y se alinea en el Parlament con la CUP en los reproches a los Mossos
Quim Torra ha aprovechado la sesión de control en el Parlament de Cataluña para cargar contra Ada Colau y reprocharle que el sábado lo dejara plantado y no acudiera a la reunión que convocó con los alcaldes de las cuatro capitales de provincia de Cataluña.
Torra culminó el intercambio de golpes con la presidenta del grupo de Catalunya en Comú Podem (CECP), Jéssica Albiach pidiéndole que le pregunte a Colau «si quiere ejercer de alcaldesa de la capital de Cataluña o no», y remató: «Se ha acabado el tiempo de la equidistancia: o estamos con los represaliados o con los represores».
El encontronazo no hace sino agravar el desencuentro con los comunes, que la semana pasada, por boca de Albiach, le pidió la dimisión después de que la el president lanzara a título personal su propuesta de ejercer la autodeterminación esta legislatura.
Torra dijo después en una entrevista en TV·que a Albiach la veía «un poco demasiado enfadada», y la líder parlamentaria de los comunes se lo reprochó este miércoles. «Es un comentario muy poco feminista y un poco paternalista», le espetó Albiach, que subrayó que no pidió que dimitiera por estar enfadada, sino porque «ya nadie le tiene por un interlocutor válido». «Lo que tiene que hacer es convocar al pleno, no a la asamblea de electos, para presentar su dimisión o una moción de confianza», reiteró, y el president replicó cargando contra Colau.
Cada choque con los comunes aleja un poco más la aprobación de los presupuestos de 2020, porque CECP era ya la única formación que aún mantenía su disposición a negociarlos.
Quim Torra se alinea con la CUP
Poco más dio de sí la sesión de control a Torra, que insistió en reprocharle al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, que se niegue a atender sus llamadas y que, ejemplificando lo paradójico de su actual situación, llegó a dar la razón a la CUP cuando cargo contra los Mossos d’Esquadra y las gracias a su gobierno por «el apoyo» durante los convulsos diez días posteriores a la comunicación de la sentencia del Tribunal Supremo en la causa del procés.
Ese agradecimiento sería innecesario en circunstancias normales, pero no tanto dado el alto grado de descomposición del ejecutivo, que ha dado la espalda a la propuesta de referéndum por la vía rápida del president.
Para quien no hubo agradecimientos fue para la policía catalana. Es más, Torra le dijo al cupero Vidal Aragonés que tenía razón cuando este denunció excesos policiales en las cargas. «¿Se cree que a mí me han gustado muchas de las imágenes y actuaciones que se han visto estos días?», replicó, y enfatizó lo que ya anunció el martes: que ha exigido al conseller de Interior, Miquel Buch, iniciar de forma inmediata las investigaciones internas y abrir los expedientes oportunos para aclarar los hechos y depurar responsabilidades en el cuerpo, y que ha pedido una comisión de investigación en el Parlament.
«Las comisiones de investigación son para depurar responsabilidades políticas, y esas son la del conseller y la de usted», le recordó el líder del PSC, Miquel Iceta.