Tensión en el Senado entre PSOE y PP por la Ley de Vivienda
La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, asegura que con la nueva normativa se darán incentivos a grandes propietarios mientras que el PP asegura que se trata de una ley "nefasta"
Nueva riña en el Senado entre PSOE y PP por el anteproyecto de Ley de Vivienda. La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha asegurado este martes que la nueva Ley de Vivienda que el Gobierno busca aprobar sólo limitará los precios del alquiler en las zonas «claramente tensionadas» y que sólo afectará a grandes propietarios que sean personas jurídicas mientras que desde el PP han pronosticado que esta ley «traerá consecuencias poco beneficiosas».
Según ha explicado Sánchez, esta ley que, por el momento, se encuentra en fase de anteproyecto, implementará un marco «estable» que garantice el acceso a la vivienda para la población, pero que no impondrá un control de precios generalizado a los grandes propietarios.
Además, ha añadido que la nueva normativa está orientada a ofrecer incentivos fiscales a estos grandes propietarios más que a imponer un régimen restrictivo y que serán los gobiernos autonómicos quienes, en última instancia, decidirán si aplican esta normativa en sus respectivos territorios.
El diputado del Grupo Popular, Pedro Manuel Rollán, por su parte, ha exigido a la ministra que «tomen ejemplo» desde el Gobierno de la gestión de la Comunidad de Madrid, que recientemente ha adjudicado 5.000 viviendas protegidas bajo el modelo de colaboración público-privado.
Desde la bancada ‘popular’, el diputado ha aconsejado que «no tramiten esa nefasta ley que traerá consecuencias poco beneficiosas«. También ha reflexionado que el problema del acceso a la vivienda es una consecuencia de la alta tasa de desempleo que hay en España, a lo que hay que sumar la insuficiencia de oferta del parque de vivienda.
Ante estas palabras, la ministra ha acusado al principal partido de la oposición de ser el causante de esta situación y ha señalado la ley del suelo implementada por el PP como la causante de que ahora «un trabajo y un sueldo» no basten para que los jóvenes puedan alquilar una vivienda.