Societat Civil Catalana y Pedro J. Ramírez celebran la otra Diada
Tarragona y Madrid defienden un discurso alternativo a la independencia de Cataluña
Barcelona ha dibujado una V humana tras congregar a entre 500.000 personas y 1,8 millones de ciudadanos, según las diferentes cifras de los organizadores o de las aportadas por la delegación del Gobierno.
Pero la capital catalana no ha sido el único escenario en el que se ha celebrado la Diada de Cataluña. Tarragona y Madrid también han ilustrado su particular 11 de septiembre, en la que las esteladas no han sido las protagonistas y se ha dado paso a las senyeras y a la bandera española.
Societat Civil Catalana ha congregado a miles de manifestantes en la ciudad tarraconense bajo el lema Recuperem el seny, recuperem la senyera (Recuperemos la sensatez, recuperemos la senyera), donde ha querido encarnar una Cataluña más plural alejada de las reivindicaciones que han llenado las calles de Barcelona.
Chacón reclama una Diada para todos
La ex ministra socialista de Defensa y la actual secretaria de relaciones internacionales del PSOE, Carme Chacón; la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, o el presidente de Ciutadans, Albert Rivera, han sido algunos de los apoyos políticos que ha recibido la celebración de una Diada no independentista.
Desde Tarragona, Chacón le ha pedido al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que la Diada “vuelva a ser de todos, sin distinción”, y ha celebrado la presencia de compañeros socialistas en la que se ha convertido en el otro 11 de septiembre.
«Mas ha preferido que se escenifique la ruptura. Pero no es solo la voluntad de Mas y del independentismo romper con el resto de España, sino romper también la propia sociedad. Y es algo que un Govern no puede hacer nunca, sino que tiene obligación de impulsar la convivencia y la concordia».
Pedro J. recurre a profesionales para dar otra visión del 11S
Pedro J. Ramírez ha respondido este jueves a los actos independentistas con su propia Diada histórica. El ex director de El Mundo ha acudido emocionado al Club Siglo XXI para presentar la primera parte de Una jornada para la Historia. 11 de septiembre de 1714. Cataluña en España, tres siglos después, un acto organizado por el club y la revista La Aventura de la Historia.
A las puertas del centro, Pedro J. Ramírez ha subrayado la emoción que ha sentido por “ver largas colas de personas inscribiéndose” y después, en su intervención, ha sido crítico con el nacionalismo que, a su parecer, puede convertirse en el enemigo, como ha ocurrido en Cataluña.
Para combatir con los planes independentistas de Artur Mas, la mejor fórmula para Pedro J. Ramírez es acudir a los expertos e historiadores que pueden dar un enfoque más racional a los hechos. “Cuando los ciudadanos se convierten en rehenes del pasado y de los mitos, ése es el momento en el que los historiadores deben liberarlos de esas cadenas”, ha subrayado.
Una única historia científica, pero compleja
Los asistentes al acto han puesto de relieve, sobre todo, la necesidad de romper con la historia los mitos y las distorsiones que se hayan realizado con una intención o interés específico. Así, el historiador valenciano Ricardo García Cárcel ha insistido en la importancia de reivindicar la historia, pero basada en un estudio científico. “Sólo hay una historia científica y es compleja con matices, no maniquea, de buenos y malos”, ha añadido.
A la intervención de Cárcel siguieron la de otros profesionales como el profesor de la Universidad de Córdoba, Manuel Peña Díaz, el profesor en la École des Hautes Études en Sciences Sociales (EHSS), Jordi Canal y la catedrática de Historia Moderna de la Complutenese, Carmen Sanz Ayán. Todos ellos explicaron desde el punto de vista más histórico qué ocurrió en Barcelona en 1714.