Societat Civil Catalana logra un «pleno» en el acto de celebración de la Constitución
Dirigentes del PSC, PP, Ciutadans y UPyD defienden el doble lema 'Convivencia y consenso' como respuesta al problema catalán
Difícil, complicado, porque el llamado bloque constitucional defiende posiciones distintas, aunque les una el rechazo al proceso soberanista que vive Cataluña. Pese a todo, cerca de 800 personas han llenado el auditorio Axa de la Illa Diagonal de Barcelona, con la presencia de dirigentes del PSC, –con el ex president José Montilla y el primer secretario, Miquel Iceta— a la cabeza, del PP de Cataluña, con Alicia Sánchez-Camacho, y con miembros de las direcciones de Ciutadans y UPyD.
El acto ha sido organizado por Societat Civil Catalana, que preside Joan Ramon Bosch, junto al vicepresidente Joaquim Coll. Los dos han apostado por superar las diferencias y buscar un doble «sí-sí», jugando con la respuesta de los soberanistas a la consulta del 9N: «Sí a la convivencia y sí al consenso». Bosch y Coll han considerado que «no habrá otra vía posible para superar el problema que el consenso».
Reformar o cambiar leyes
Diferentes especialistas, como Teresa Freixes, Ramon Punset, Francesc de Carreras o Montse Baras, moderados por Manuel Campo Vidal, han debatido sobre la actual Constitución de 1978. La idea de fondo es que la Carta Magna, «que ha hecho un enorme servicio al conjunto de los españoles», en palabras de Freixes, se puede modificar y se debe retocar.
Pero se puede avanzar buscando primero la reforma del Título X de la Constitución, para que sea un texto menos rígido, según Punset. Baras ha apostado por identificar exactamente, también, lo que se debe modificar, dejando claro que determinados problemas se pueden solucionar con cambios meramente legislativos.
El bloque constitucionalista toma conciencia
El hecho es que el bloque constitucionalista ha tomado conciencia de que debe aunar esfuerzos, pese a las diferencias que se puedan presentar en el camino.
Los socialistas catalanes se han implicado, esta vez, con una mayor determinación. En los primeros pasos de Societat Civil Catalana, los recelos fueron grandes, pero a medida que la propia entidad ha comenzado a defender medidas concretas, como una reforma de la Constitución, el PSC ha mostrado más interés.
La posición del PP
El problema ahora es ver cómo puede evolucionar este bloque. El PP catalán se muestra más reacio a esa reforma, porque desea una mayor concreción por parte de los socialistas. El presidente Mariano Rajoy ha rechazado, este mismo jueves, abrir una subcomisión en el Congreso sobre esa reforma de la Carta Magna, como le ha pedido el líder del PSOE, Pedro Sánchez.
Pero el bloque constitucionalista podría comenzar a caminar, a partir del acto de Societat Civil Catalana.