Simón espera que pronto empiece la relajación en el uso de las mascarillas
El epidemiólogo abre la puerta a la relajación del uso de mascarillas pero evita dar fechas ya que no hay que "dar la idea de que en un momento dado hemos terminado con la COVID-19”.
La campaña de vacunación avanza en España, las vacunas llegan y tanto Gobierno como Comunidades Autónomas planifican rebajar los tramos de edad de las personas a las que inmunizar mientras que el Presidente Pedro Sánchez puso hace tan solo unas jornadas la meta de 100 días hasta que el país consiga la inmunidad de grupo.
En este contexto, en el que España ha conseguido bajar la incidencia de contagios a 151,8 de media, aproximadamente, el director de del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, ha anunciado que, en su opinión, en poco tiempo se podrá iniciar una relajación del uso de las mascarillas.
Siguiendo la estela de Estados Unidos, donde estados como el de Nueva York dejarán de imponer la mascarilla a quienes ya han recibido la vacuna, Simón ha planteado que se puedan dar “pasos concretos” en esa dirección que pueden ir “relativamente rápido”.
Y es que los indicadores de incidencia muestran que el país lleva 22 días con sus datos en una tendencia descendente sin ningún rebrote o pico de contagios.
Según ha avanzado el medio digital ElDiario.es, el epidemiólogo ha avisado que antes debería modificarse el documento de actuaciones de respuesta rápida a la pandemia que se aprobó el verano pasado entre Sanidad y las Comunidades Autónomas, ya que no se contemplaba la vacunación como un elemento paliativo de la crisis.
Además, ha recordado que quedan muchos elementos a valorar, como si esta medida se aplicaría en función de la incidencia de las comunidades o si se haría de una forma global.
Pese a que líderes políticos como el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ya avanzaron que tenían la intención de quitar la imposición de las mascarillas como mínimo parcialmente, Simón, más comedido, ha preferido no “dar fechas concretas” porque puede “dar la idea de que en un momento dado hemos terminado con la COVID-19”.
“No podemos plantear que dejar de usar las mascarillas” permita “dejar de mantener la distancia física”, ha sentenciado el epidemiólogo.