El boicot independentista a la policía acaba con seis detenidos
Seis detenidos y, al menos, un mosso herido después de que los CDR intentaran boicotear una manifestación de sindicatos policiales en Barcelona
El altercado que tensó Barcelona la mañana del sábado registra ya seis independentistas detenidos y al menos un agente de los Mossos d’Esquadra herido. La contramanifestación convocada por la ANC, la CUP y los CDR, para responder a la concentración de policías nacionales y guardias civiles en la capital catalana, tuvo lugar en las cercanías de la Jefatura Superior de Policía, en la Via Laietana.
Los mossos, que aún no terminan el balance definitivo de la jornada, informaron de que todos los detenidos están acusados de un delito de atentado a la autoridad. También se abrió una investigación a una séptima persona que no fue detenida. Algunas de las detenciones se produjeron en las inmediaciones de la plaza del Àngel y Cataluña, siempre en el centro de Barcelona.
«Tras advertir sin éxito a los concentrados en reiteradas ocasiones por megafonía que respetaran el cordón policial, se ha actuado para recuperar el espacio», defendió un portavoz de la policía catalana. La decisión de cargar contra los independentistas respondió a «diversos ataques directos contra la línea policial y el lanzamiento de objetos y huevos».
Antagonismo en las calles de Barcelona
Poco antes de que diera inicio la manifestación policial, convocada por Jusapol, un grupo de independentistas lanzaron polvos de colores a los mossos que hacían un cordón de seguridad para evitar que se encontraran manifestantes contrarios. Los policías nacionales y guardias civiles demandaban equiparación salarial pero también homenajearon a sus compañeros que participaron en la operación del 1-O, hace un año.
La plaza de Sant Jaume amaneció con varias decenas de personas que durmieron allí, convocadas por Arran, la entidad juvenil de la CUP. Jusapol pretendía manifestarse en la plaza, pero tras las órdenes de la Generalitat el viernes la trasladaron a la Via Laietana. Conforme los policías iban llegando a su lugar, en Sant Jaume se concentraban 6.000 independentistas que luego tomaron rumbo a la Jefatura Superior de Policía.
No más encontrándose los manifestantes con los mossos que hacían un cordón de seguridad para evitar conflictos, los independentistas cambiaron de plan sobre la marcha y decidieron lanzar polvos a la policía autonómica, cuando originalmente los destinatarios debían ser los policías y guardias civiles concentrados. También tiraron huevos y otros objetos, según los agentes.
Los 3.000 policías convocados por Jusapol echaron a andar hacia la plaza Cataluña, escoltados por los mossos. El presidente de la asociación policial, Natam Espinosa, tomó el micrófono y acusó al Gobierno de dejarles en el «olvido» por no compensar el esfuerzo que hizo el cuerpo «para preservar la unidad de España» durante los acontecimientos relacionados al referéndum ilegal del 1 de octubre.
La policía catalana acordonó toda la plaza. Frente a ellos, los independentistas que hace un año aplaudían su actuación antes y durante el 1-O, ahora izaban sus banderas y gritaban, una y otra vez, «¡menos mossos y más bomberos!».