Se acercan elecciones: Puigdemont desafía de nuevo al PDeCat
Carles Puigdemont prepara su nuevo partido al margen de los presos y de Convergència, mientras se acercan unas elecciones que podrían llegar en octubre
Este sábado, el expresident catalán Carles Puigdemont volvió a Perpiñán, después de haber estado allí justo antes de la cuarentena. El 29 de febrero reunió en la ciudad a más de 100.000 personas tras una convocatoria del Consell per la República para hacer un llamamiento a “prepararse para la lucha definitiva”.
Sin embargo, el espíritu de aquellas negociaciones se evaporó con el confinamiento, y también el principio de acuerdo que Jordi Sànchez tenía con David Bonvehí para vertebrar Junts per Catalunya como partido político.
En este contexto, el expresident fugado a Bélgica desde otoño de 217 prevé anunciar en breve la creación de un nuevo partido y romper así con el PDeCat para la reordenación del espacio de JxCat. El compromiso seguirá siendo “acelerar el proceso”.
Algo que vuelve a poner de manifiesto el fuerte clima preelectoral que hay en Cataluña, ante la inminente habilitación del mandatario autonómico, Quim Torra, que en septiembre podría tener que dejar el cargo una vez sea firme su inhabilitación por un delito de desobediencia.
“La imagen de JxCat es la del expresident”, indican fuentes cercanas a Puigdemont. Convergència debe saldar la condena por el caso Palau (6,6 millones), y entre los impulsores del nuevo partido de Puigdemont se sostiene que no se van a arriesgar a una reclamación económica por un delito de corrupción. “La Fiscalía no tardaría ni un minuto en buscarnos”.
La nueva formación fijará su estructura en la asamblea del día 25 de julio, que será todo lo multitudinaria que el coronavirus permita. De allí debe salir Puigdemont como presidente y se definirá la estructura ejecutiva de la formación, en la que previsiblemente no estarán ni Jordi Sànchez ni los presos.
La convocatoria de elecciones para el 4 de Octubre
Esto ocurrirá así debido al artículo 2 de la ley de Partidos, que establece que los promotores de un nuevo partido no pueden haber sido condenados por delitos graves como la sedición. Se discutirá el sistema de elección de los cargos y se definirá el mecanismo de militancia. El manifiesto fundacional abrirá un proceso participativo para elaborar el programa electoral y la candidatura se decidirá en primarias.
Por otro lado, el núcleo que dirige Bonvehí con Solsona, Ferran Bel y Marc Castells, reforzado por Montserrat Candini, Lluís Font o Quim Nin, está trabajando en una propuesta electoral propia, como explica La Vanguardia.
La decisión para convocar elecciones es del president Torra, pero sin duda la pactará con Puigdemont. En el entorno del expresident prefieren ganar tiempo y que Torra convoque después de pasar por el Tribunal Supremo para celebrar las elecciones en noviembre.
De hecho, creen que su plan es dejar encarrilada la crisis del coronavirus, superar la vuelta al cole el 14 de septiembre e ir a las urnas el 4-O. Para ello, Torra debería convocar el 11 de agosto y la campaña comenzaría el 17 de septiembre, justo el día que el Supremo ha convocado la vista para revisar el recurso a su condena de inhabilitación.