Santi Vila pide al Supremo sus 50.000 euros por «extrema necesidad»

El exconseller Santi Vila ha pedido al Tribunal Supremo que le devuelva la fianza de 50.000 euros que pagó para eludir su ingreso en prisión, alegando que los costes de desplazamiento y alojamiento para asistir al juicio del procés, en el que está encausado, le están dejando en una «situación económica de extrema necesidad».

Vila, que afronta acusaciones que podrían comportarle hasta siete años de cárcel, reclama la devolución de la fianza que pagó el 3 de noviembre de 2017 para asi «poder sufragar los elevados costes económicos de desplazamiento, alojamiento y manutención ocasionados por la celebración» del juicio en Madrid.

Sin dar clases y con reducción de jornada

Joan Segarra, abogado del despacho Molins que defiende a Vila en el Supremo, expone en su escrito que el juicio ha comportado una «relevante disminución de los únicos ingresos económicos» de los que dispone el exconseller, debido a la «drástica limitación de su actividad laboral», según informa la agencia EFE.

El procesado precisa en ese sentido que ha tenido que suspender las clases que imparte en la Universidad Ramon Llull y ha visto «reducida considerablemente» su actividad laboral como director de la empresa Aigües de Banyoles, SAU, ubicada en Girona, dado que solo puede trabajar en ella uno o dos días semanales como máximo al celebrarse el juicio normalmente de martes a jueves y a veces también el lunes.

Además de los gastos por sus viajes a Madrid, Vila explica que igualmente tiene que hacer frente a los costes legales de su defensa «sin ayuda económica de ningún tipo».

El escrito alega que «no subsisten» los motivos que en su día motivaron que la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela impusiera una fianza a Vila, que fue el único de los exconsellers procesados a quien se la fijó, porque ahora está «diariamente» a disposición del Supremo.