Sánchez y Torra negocian in extremis el formato de su encuentro
Moncloa y Generalitat siguen sin incorporar en sus agendas el encuentro, previsto este jueves a las 19.00 horas
A falta de pocas horas para el encuentro entre Pedro Sánchez y Quim Torra, que está previsto que arranque a las 19.00 horas de este jueves en el Palacio de Pedralbes, en Barcelona, Gobierno y Generalitat siguen negociando el formato que tendrá la reunión.
Así lo ha admitido la consellera de Presidencia, Elsa Artadi. En la rueda de prensa posterior a la reunión del consejo ejecutivo de la Generalitat, Artadi dio por hecho que el encuentro se celebrará y también que ella y el vicepresidente catalán, Pere Aragonès, participarán en la misma. En consecuencia, también participarían la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, y un ministro, probablemente la titular de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet.
Eso, admitió, es «lo más probable», pero, según Artadi, lo que se sigue discutiendo es si se incorpora al encuentro algún otro miembro de cada uno de ambos ejecutivos, como pretende la Generalitat, un extremo que reconoció que también puede depender de la disponibilidad de los ministros, parte de los cuales se desplazan este jueves a Barcelona junto a Sánchez, mientras que otros lo harán mañana viernes.
Según Artadi, Sánchez se reunirá «un rato a solas» con Torra, a petición del propio presidente del Gobierno, pero ella y Aragonès no se reunirán aparte con Calvo y Batet, como dio a entender ayer la vicepresidente del Gobierno, sino en un mismo encuentro conjunto con ambos presidentes. Moncloa todavía no ha confirmado estos extremos.
Torra y Sánchez, también en el acto de Foment
Sánchez y Torra no sólo se verán las caras en el palacio de Pedralbes esta tarde, sino que volverán a coincidir, horas después, en una cena organizada por la patronal catalana Foment del Treball. La organización empresarial, presidida por Josep Sánchez Llibre, ha invitado de forma reiterada a Torra y finalmente el presidente de la Generalitat ha accedido a acudir. Lo que no aclaró Artadi es si se quedará a cenar o solo «pasará un rato». La razón, alegó, es que tiene que «encajar diferentes compromisos».
Pese a la expectación y el suspense generados en torno a la reunión, todo apunta a que resultará estéril. De hecho, a diferencia de los preparativos de la primera cita mantenida en julio entre Sánchez y Torra, esta vez la discusión entre los negociadores se ha centrado en el formato. Pero, por lo que respecta al orden del día, todo se limita la inexistencia de vetos. Es decir: «se podrá hablar de todo», en palabras de Artadi.
Así, Torra ya anunció que piensa hablar de presos, derecho de autodeterminación y rechazo al 155, tanto en su aplicación pasada como de cara a eventuales reediciones, porque esos son, alega el president, los asuntos que mayor consenso suscitan entre la población catalana. Y Sánchez, que se dedicará a hablar de la agenda social.
«Podríamos tener un orden del día más cerrado si se hubiera avanzado más en el diálogo por parte de Pedro Sánchez», reprochó al presidente a portavoz del govern, que abogó por dar continuidad a las conversaciones y evitar que vuelvan a transcurrir varios meses antes del próximo encuentro, como ha pasado entre el primero y el segundo, separados por casi medio año y sin ningún acercamiento concreto.