Sánchez y Feijóo volverán a debatir este martes en el pleno del Senado

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, volverán a debatir el próximo martes en el Senado sobre medidas económicas y fiscales. El nuevo cara a cara entre el líder del Ejecutivo y el líder de la oposición llega seis semanas después del debate entre ambos en la Cámara Alta a cuenta de las medidas ahorro energético que el Gobierno adoptó en agosto.

La anterior comparecencia de Sánchez en este hemiciclo casi fue monopolizada por el enfrentamiento entre el presidente y el líder del PP, que al no ser diputado solo tiene oportunidad de debatir con el jefe del Ejecutivo en el Senado cuando acude, una vez al mes, a las sesiones de control.

Fue un duro encontronazo en el cual Pedro Sánchez se empleó a fondo para desacreditar a Feijóo como dirigente del PP, en tanto que el jefe de la oposición reprobó la gestión y la inclinación a la «descalificación» de Sánchez, al que vio como «un mal presidente en los últimos momentos».

Dificultad para alcanzar acuerdos

El debate certificó así, entre reproches mutuos, la dificultad de los dos principales partidos para alcanzar acuerdos, y dejó una impresión distinta a la que, un mes más tarde, parecen apuntar los avances en las negociaciones entre PP y PSOE para desbloquear la renovación del CGPJ.

Ambos se han vuelto a ver, pero a puerta cerrada, en el Palacio de La Moncloa, donde el líder del PP fue convocado por el presidente el pasado martes una vez que el presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, consumó su dimisión, a fin de buscar una salida a la crisis institucional en el Poder Judicial.

En este otro ambiente se encontrarán el martes en el Senado, a partir de las cuatro de la tarde, justamente después de que el Consejo de Ministros haya aprobado las medidas económicas que Pedro Sánchez anunció este jueves en el Congreso, como un paquete de 3.000 millones de euros para combatir el impacto de la crisis energética en la población.

Solicitó formalmente esta comparecencia para explicar las últimas «medidas económicas y fiscales» del Gobierno, pero dándole un enfoque más autonómico, pues no en vano acude a la Cámara territorial. Por ello también quiere ahondar en el papel de las comunidades autónomas en su aplicación y en el «mantenimiento del estado de bienestar».

En todo caso, es previsible que además de la economía vuelvan a salir en la palestra otras cuestiones de calado político, como el nuevo equilibrio de fuerzas en Cataluña tras la marcha de JxCAT del Govern, así como la renovación del CGPJ y el Tribunal Constitucional o la guerra de Ucrania, siempre en el trasfondo de estas comparecencias.

Irritación en los grupos minoritarios por la anterior comparecencia de Sánchez

Sánchez tendrá enfrente, además de a Feijóo, a los portavoces de otros seis grupos parlamentarios -ERC-EH Bildu, PNV, Nacionalista (JxcAT y CC), Izquierda Confederal, Democrático y Mixto- sin contar con el socialista.

El jefe del Ejecutivo, que no tiene límite de tiempo para sus intervenciones, se extendió todo lo que quiso con Feijóo

A los grupos minoritarios les causó irritación el formato de su anterior comparecencia del 6 de septiembre, no tanto por el tiempo de que dispusieron para contestar al presidente, sino porque Sánchez se afanó en debatir con Feijóo, al que respondió de forma individual, mientras que al resto lo hizo en bloque.

Además, el jefe del Ejecutivo, que no tiene límite de tiempo para sus intervenciones, se extendió todo lo que quiso con Feijóo, al que dedicó una primera réplica de 45 minutos y una dúplica final de 20.

El jefe de la oposición, como los demás portavoces, dispondrá el martes del mismo tiempo que entonces -15 minutos para una primera intervención y 5 para la réplica- si bien es previsible que, como ocurrió en el anterior debate, el presidente de la Cámara, Ander Gil, sea flexible y permita hablar más a los oradores.

En todo caso, las quejas de los grupos ya han sido expuestas en la Junta de Portavoces; el Gobierno, a través del secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas, las ha recogido y les ha manifestado que tomaba nota.

Porque el modo en que el presidente contesta a los grupos es una exclusiva decisión suya, así que hasta el mismo martes no se sabrá si Sánchez opta por atender a todos por separado, como le han pedido, a todos juntos, o si repite la fórmula de hace un mes, con un cara a cara con Feijóo y una respuesta conjunta a los demás.