Casado acude a la llamada de Sánchez
Los líderes del PSOE y el PP volverán a verse en Moncloa dos meses después. El presidente quiere desbloquear la renovación de órganos como el CGPJ y RTVE
Imagen de archivo de Pedro Sánchez y Pablo Casado./ EFE
Pedro Sánchez y Pablo Iglesias explorarán el deshielo aunque sólo sea por unos minutos. La relación entre los líderes del PSOE y el PP ha sido prácticamente inexistente desde mediados de diciembre, cuando se reunieron en la antesala de la investidura del ahora presidente del Gobierno. Dos meses después, Casado ha aceptado citarse con Sánchez este lunes en la Moncloa, aunque solo por «respeto institucional».
Llevarán agendas opuestas. El presidente del PP prevé expresar a Sánchez su gran «preocupación» por la «degradación institucional» que ha detectado tras más de un mes de haberse formado la coalición con Unidas Podemos. La crisis catalana y las cesiones a Quim Torra y a Esquerra Republicana (ERC), así como una situación económica que para los populares es inquietante, son sus prioridades.
En cambio, Sánchez tiene otros asuntos en mente. Haciendo uso de una dinámica de negociación focalizada –sabe exactamente qué quiere de Podemos y de ERC, y hasta ahora va consiguiéndolo–, el presidente del Gobierno entiende que hay asuntos sobre los que solo puede discutir con Casado, a pesar de todo. La renovación de órganos constitucionales como RTVE y el Defensor del Pueblo, por ejemplo.
Renovación del CGPJ
Lo que más interesa al líder socialista es la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), de mayoría conservadora y en funciones desde diciembre de 2018. La renovación requiere una mayoría de 210 apoyos en el Congreso de los Diputados, que solo la suma de PSOE y PP (más Navarra Suma) pueden conseguir. Socialistas y populares casi logran un pacto en 2018, pero se cayó.
El actual CGPJ fue nombrado en 2013, cuando el PP tenía mayoría absoluta en las Cortes. En noviembre de 2018, Casado y Sánchez pactaron renovar el Consejo con el magistrado conservador Manuel Marchena a la cabeza, obteniendo a cambio el PSOE 11 vocales frente a los nueve del PP. Unos mensajes filtrados del portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, dinamitaron la negociación.
Antes de la investidura había señales de una posible negociación, pero los pactos de Sánchez con Podemos y ERC –con Bildu como aliado paralelo– la echaron por tierra. Los populares se han comprometido a ser una oposición inexorable ante lo que consideran cesiones a «terroristas y golpistas», y tienen intención de seguir bloqueando el Consejo como ya hicieron durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
El PP ya ha advertido que no negociará nada hasta que no se cambie el modelo de elección de los jueces. Casado quiere reformar la Ley Orgánica del Poder Judicial para que los jueces elijan directamente a 12 de los 20 vocales en el Consejo; los ocho restantes los propondrían los partidos.
