Sánchez vende a los jóvenes la «cultura de la propiedad» y la vida en comunidad

El presidente se rodea de jóvenes en un acto en Alicante y admite que "el 85% sigue viviendo en el domicilio familiar"

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, (d) tras visitar el área de regeneración y renovación urbana del barrio San Antón de Elche.EFE/ Manuel Lorenzo

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, (d) tras visitar el área de regeneración y renovación urbana del barrio San Antón de Elche.EFE/ Manuel Lorenzo

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El principal punto débil de Pedro Sánchez son los jóvenes y Moncloa lo sabe. De las medidas aprobadas por el Gobierno de coalición esta legislatura, las destinadas a los jóvenes están a la cola. De ahí que el presidente haya querido realizar un acto con jóvenes este miércoles en Alicante para presentar las medidas, que este martes aprobó el Consejo de Ministros, para acceder a la vivienda y favorecer su emancipación. Todo ello a falta de aprobar el anteproyecto de Ley de Vivienda, que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) tumbó esta semana ante ciertos «aspectos técnicos» que aconseja al Ejecutivo modificar para no caer en inseguridad jurídica.

El presidente vende a los jóvenes la «cultura de la propiedad» para que compren su propia casa, también elogia la cultura del alquiler «con precios asequibles gracias a las ayudas que ha aprobado el Gobierno» y no se olvida del ‘cohousing’ o la vida en comuna asegurando que «es algo que queremos incentivar también en nuestro país» y «de la que ya disfrutan jóvenes y también personas mayores». Sánchez les ofrece todo apelando a una «solidaridad intergeneracional».

El Gobierno es consciente del drama que supone hoy en día en España el acceso a la vivienda. La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, habló de dar una oportunidad a los jóvenes para que salgan «del laberinto al que se enfrentan por no poder comprar y tener que destinar más del 40% de los ingresos para pagar un alquiler».

Por su parte, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, criticó la reciente subida del precio de las viviendas «porque limita la capacidad de un proyecto libre de vida». La prioridad de Sánchez es «dignificar la vida de la mayoría social de nuestro país», según explicó.

Sánchez admite que el 85% de los jóvenes vive con sus padres

El presidente lamenta ahora que la emancipación de los jóvenes sea «un drama porque representa la mayor de las desigualdades» y admite, apoyado de estudios recientes, que «el 85% de los jóvenes en nuestro país sigue viviendo en el domicilio familiar.

De ahí que el jefe del Ejecutivo se dirigió directamente a su público para señalar que su intención es «convertir la vivienda en un derecho social y no un problema para nuestros jóvenes. Empoderar a los jóvenes. Al final seréis vosotros lo que decidáis qué hacer con esos recursos, las ayudas que os da el Estado».

Sánchez presentó el bono al alquiler para jóvenes de entre 18 y 35 años. Un bono donde ya asegura que el plazo para solicitarlo se demorará todavía unos meses, ya que antes de que se abran las convocatorias, el Ministerio y las comunidades autónomas tendrán que consensuar los criterios en la Conferencia Intersectorial (pendiente todavía de fijar una fecha). Si bien es cierto, tendrá efecto retroactivo desde el 1 de enero.

La letra pequeña de la medida que Sánchez olvidó mencionar en este acto es que, de nuevo, la responsabilidad volverá a recaer en las comunidades autónomas. Los territorios serán los que tendrán que decidir cómo abonan esa cuantía a los beneficiarios de esta ayuda. El Gobierno simplemente se limita a fijar el importe del mismo. 

Los requisitos para solicitar el bono joven al alquiler, además de la edad, obligan a contar con un contrato de alquiler y un contrato laboral cuyos ingresos no superen en tres veces el IPREM, de 24.318 euros anuales. Es decir que esta medida, tal y como publicó Economía Digital, solo llegará al 1% de los jóvenes en España.

El presidente del Gobierno también habló de ampliar el apoyo a los jóvenes para el acceso de la vivienda en régimen de propiedad. Una ‘rara avis’ en España donde el precio y la financiación se imponen frente a esta realidad.

De hecho y según los datos más recientes de la oficina de estadística europea (Eurostat), el porcentaje de propietarios de vivienda en España ha pasado del 79,8% en 2010 al 75,1% de la población en 2020, 4,7 puntos porcentuales menos. En ese mismo periodo, el porcentaje de población que vive de alquiler se ha incrementado del 20,2% al 24,9%. Lejos, eso sí, de la media de la UE (30,3%). Y más todavía de la de países como Alemania o Austria, donde supera de largo el 40%.

Sánchez primó el apoyo del Gobierno a los jóvenes para que sean propietarios «en un país donde nos gusta ser propietarios de nuestras viviendas. Queremos ser propietarios de nuestras viviendas. Queremos impulsar la cultura de la propiedad en los municipios más grandes y en el ámbito rural para cumplir el reto demográfico», señaló.

El Gobierno promoverá la vida en comunidad

Tímidamente y para completar la oferta, Sánchez se refirió al ‘cohousing’. «El régimen cooperativo donde conviven muchos jóvenes y también cada vez más personas mayores. Queremos también incentivarlo en nuestro país. De hecho, España mantiene un régimen cooperativo internacional con clara vocación de integración social», dijo el presidente.

Las ayudas al cohousing, de tendencia minoritaria todavía en España, entrarán en el Plan Estatal de Vivienda que plantea el Gobierno. Consiste en un modelo de comunidad en el que sus habitantes tienen un espacio privado, una habitación, y comparten otros para recursos y servicios públicos teniendo que gestionarse entre todos, a diferencia del complejo residencial o a la promoción de vivienda pública habitual.  

Al igual que el bono de alquiler, esta medida también deberá consensuarse con las comunidades autónomas en la próxima conferencia sectorial. La letra pequeña es que el Gobierno no ha incluido en el plan aprobado la definición de cohousing. Los expertos señalan ahora que esta falta de definición podría llevar a la creación de «infraviviendas subvencionadas» por el Estado.

Si bien, el plan establece que podrán obtener estas ayudas «las promociones de modalidades residenciales tipo cohousing, de viviendas intergeneracionales o similares que se vayan a ceder en uso o destinar al arrendamiento durante un plazo mínimo de veinte años». Además, se admite cualquier forma jurídica y de titularidad pública o privada.

El presidente del Gobierno escogió una ‘comunidad amiga’ gobernada por el socialista Ximo Puig en coalición con Compromís y Unidas Podemos para presentar las medidas aprobadas sobre Vivienda ante 70 jóvenes que se han dado cita en la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO).

Con un auditorio a medio gas, Sánchez aseguró que «un país digno no puede tener dificultades de acceso a la vivienda». Desde el Gobierno explican que Sánchez saldrá más a la calle porque «la ciudadanía tiene que conocer las medidas que está aprobando el gobierno más social», esgrimen, en un año preelectoral con comicios en Castilla y León el próximo 13 de febrero y Andalucía pendiente de anunciar la cita.

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