Sánchez no «ofenderá» a Marruecos pero defiende que Ceuta y Melilla son «territorio español»
El presidente del Gobierno ha avanzado que su Ejecutivo y el Gobierno alauita han "asumido un compromiso de respeto mutuo. Vamos a evitar cualquier cosa que ofenda al otro"
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha explicado este miércoles en el Congreso cuál es el marco de las relaciones entre España y Marruecos tras el viaje del pasado mes de abril sobre el que no había dado explicaciones a la Cámara. Así, Sánchez ha avanzado que su Ejecutivo y el Gobierno alauita han «asumido un compromiso de respeto mutuo. Vamos a evitar cualquier cosa que ofenda al otro«, ha subrayado.
«Nosotros no vamos a permitir que se hable de Ceuta y Melilla como territorios ocupados, porque son territorio español y europeo internacionalmente reconocido, pero Marruecos merece la misma consideración cuando hablamos de los asuntos que les preocupan«, ha matizado Sánchez, en alusión a la situación del Sáhara.
Sin embargo, se ha afanado en dejar claro que «la soberanía de Ceuta y Melilla están fuera de cualquier duda».
El plan marroquí para el Sáhara, «el más creíble»
Es por ello que el presidente del Gobierno ha defendido que no vuelva el «comercio atípico» a ambas ciudades autónomas, sino que sean los operadores económicos de ambos países los que consigan normalizar el paso de personas y mercancías. «Vamos a asegurar que se cumple la legalidad y que tenemos los instrumentos aduaneros correctos», ha precisado.
Sánchez ha insistido en que el plan de autonomía marroquí para el Sáhara es «la base más sólida, creíble y realista» para resolver el conflicto y así lo ven cada vez más países, entre los que ha citado a Francia, Estados Unidos y Alemania.
«Tenemos que mover nuestras posiciones»
«47 años deberían ser suficientes para entender que tenemos que mover nuestras posiciones», ha alegado. «Hay que desencallar un conflicto que dura mucho tiempo y todo se tiene que hacer según la resolución de la ONU».
También ha pedido reforzar la cooperación en el ámbito de la inmigración, dado que «España no va a tolerar la instrumentalización de la tragedia como arma de presión». Así, ha defendido la importancia de los «modelos exitosos» de inmigración circular . «La cooperación es clave en materia migratoria».
Dos meses después de la firma de la declaración conjunta cree que hay un avance positivo, de impulso de un nuevo tiempo en el que, no obstante, aún queda mucho por hacer, y se ha mostrado convencido de que, con ella, la relación bilateral se ha situado sobre una base más sólida.
El PP le pide «neutralidad» con el Sáhara
Las reacciones no se han hecho esperar. La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, ha pedido que Sánchez vuelva a una posición de «neutralidad activa» sobre el Sáhara Occidental, en el marco de la solución negociada por las partes, que pide la ONU, y ha preguntado de qué sirve el viraje si las aduanas con Marruecos siguen cerradas.
Los populares han reprochado el «bandazo» y lo tachan además de «fracaso» del propio Pedro Sánchez porque se mantiene cerrada la aduana comercial. Es por ello que han reclamado que el líder socialista arregle el «estropicio» generado con Argelia por el cambio de posición en el Sáhara.